Los feminicidas afrontarán un aumento de 30 a 40 años de pena máxima
que puede elevarse hasta a 60 con el cúmulo de pena, informó el presidente de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, cuyas
propuestas de modificaciones al código penal presentará al pleno esta semana
próxima.
El diputado Demóstenes Martínez informó que los comisionados esperan no
más la remisión de las revisiones a las propuestas por parte de la comisión creada
por el Poder Ejecutivo que preside el doctor Artagnan Pérez Méndez que prometió
devolverlas este viernes.
“Por ello, en menos de una semana esperamos presentar el informe al
pleno”, dijo el legislador entrevistado por los periodistas Manuel Jiménez y
Ángel Barriuso en Propuesta de la
Noche que se difunde de lunes a viernes de 7:0 a 8:00 por
Digital 15.
En el informe se incorporó la figura del feminicidio bajo la definición
de que en él incurre todo hombre que mata a una mujer que sea su pareja, a su
ex pareja o aquel que igualmente mata a la mujer pretendida por ella
rechazarlo.
También el resultado de las modificaciones incorporó entre las
propuestas el sicariato que es penalizado con 30 a 40 años por igual a quien
paga, al que actúa de intermediario y al que ejecuta asesinatos por encargo, y
se revisan las penas y las multas que van desde uno hasta a diez pesos, lo
mismo que el delito electrónico.
Asimismo se penaliza todo ataque de una persona a otra con sustancias
químicas (ácido del Diablo) y se impone de 4 a 5 años de prisión a aquellos delitos
cometidos por adultos que utilizan o se acompañan de menores, sentencia que
puede llegar a 50 años, por los 40 consignados en el código a esta violación.
En otro orden, Demóstenes reveló que en sus propuestas de reformas al
código penallos comisionados complican
los criterios aplicables por los jueces al ordenar la libertad condicional
desconociendo sus propias jurisprudencias en casos similares.
“Se da también el caso, por ejemplo, de un feminicidio en Santiago en
que un hombre arrendó dos habitaciones hoteleras y puso a los niños en una y en
la otra mató a su mujer, como el caso también de un feminicida de una niña
haitiana a la que antes violó, y la medida de coerción en su contra lo envió al
otro día a su casa”, comentó.
Ante estos casos así como igualmente en los de narcotráfico se ha
tratado ahora con las modificaciones de complicar los criterios a los que un
juez recurre para liberar, que en estos casos de peligrosidad de fuga el
imputado no pueda salir a la calle,cerrar el círculo para evitar los baches en que incurren los
magistrados.