<b>Londres dijo adiós con la gran fiesta de despedida en el estadio
Olímpico en una noche premiada por la dulzura del clima y por un
minucioso paseo por la música pop y rock británica, uno de sus
referentes culturales, para dejar en las pupilas de los presentes un
cúmulo de sensaciones encontradas por el final y el deseo de que prosiga
el jolgorio deportivo.</b>
Londres, 12 ago (PL) Los Juegos Olímpicos de Londres, alegres y
gloriosos, ya son historia. Durante 17 días el mundo entero vibró por
las hazañas de hombres y mujeres tras una coronación soñada y para toda
la vida.
Londres dijo adiós con la gran fiesta de despedida en el estadio
Olímpico en una noche premiada por la dulzura del clima y por un
minucioso paseo por la música pop y rock británica, uno de sus
referentes culturales, para dejar en las pupilas de los presentes un
cúmulo de sensaciones encontradas por el final y el deseo de que prosiga
el jolgorio deportivo.
Jornada en la que los momentos cumbre se sucedieron uno tras otros como
el de la premiación más impactante de la lid a los ganadores del
maratón, el ugandés Stephen Kiprotich, y los kenyanos Abel Kirui y
Wilson Kipsang Kipotrich, a cargo de Jacques Rogge, presidente del
Olímpico Internacional y Lamine Diack, titular de la Federación
Internacional de Atletismo.
O la de los 70 mil voluntarios amables y solícitos, de todas las edades y
naciones del mundo en un justo reconocimiento a su contribución porque
fueron el alma y el sentir de la justa: " los reales y necesarios héroes
de estos juegos", como les llamó Rogge en su discurso de clausura en el
que catalogó a Londres-2012 como la más gloriosa y alegre.
En una noche repleta de invocación a la paz y la solidaridad entre los
hombres, no podía faltar el exBeatle Jonh Lennon con su canción
"Imagine" y su universo de sueños, una entrega patrimonial del autor a
la juventud del planeta.
Imágenes de Freddy Mercury, la reaparición de las Spice Girls, reunidas
nuevamente para esta ocasión, George Michaels, Rusell Brand, Emily
Sande, y las bandas Madnes, Take That y The Who, entre otros "cultures"
de la música británica, igualmente deleitaron la última noche de los XXX
Juegos Olímpicos.
Más de 10 mil atletas de 204 Comités Olímpicos Nacionales se dieron cita
en esta ciudad abierta a la inspiración de una generación tras
participar en certámenes clasificatorios seleccionadores de una calidad
superior.
Porque precisamente eso fueron los Juegos de Londres, los de la
excelencia deportiva con 67 récord para este tipo de competencia, los
mayores aportes de la natación y el ciclismo de pista con 23 per cápita
y al menos obtuvieron una medalla 85 países, en una clara señal de que
el deporte cambia su faz en la tierra.
Con la entrega de la bandera olímpica al alcalde de Rio de Janeiro,
Eduardo Paes, por parte de su homólogo londinense Boris Jonson, despegó
la nave hacía la sensual ciudad carioca y bastaron solo ocho minutos
para que las gradas del estadio Olímpico vibrarán con la rica samba
brasileña en la presentación de la futura sede.
La llama olímpica se apagó tras arder en Londres por tercera ocasión, y
en la memoria colectiva quedará la hazaña de una ciudad que premio a
todos con su encanto y hospitalidad.
ÂíAdiós Londres, bienvenida Río de Janeiro!
mh/cw