<b>"Me acaban de entregar el 'lineup’… es algo que no puedo explicar, es algo in-creíble tomar esa oportunidad y más de esa forma, no puedo decir nada, simple-mente que gracias a Dios por lo que sucedió y seguir adelante", señaló Mesa con los ojos llenos de lágrimas, fijos en el papel impreso con su nombre y apellido.</b>
NUEVA YORK — Aproximadamente a las 10:30 pm de la noche del lunes, 1 de octubre, el manager Joe Girardi se acercó al casillero de Melky Mesa, el cual el novato dominicano comparte con el juvenil lanzador Adam Warren, diciéndole: "Here you go kid! (¡Aquí tienes muchacho!)", con una gran sonrisa.
El manager de los Yankees de Nueva York le entregó la copia original de la tarjeta de alineación del partido, donde en la octava entrada, en sustitución de nada menos que Alex Rodríguez, Mesa tuvo su primer turno al bate en Grandes Ligas.
"Me acaban de entregar el 'lineup’… es algo que no puedo explicar, es algo in-creíble tomar esa oportunidad y más de esa forma, no puedo decir nada, simple-mente que gracias a Dios por lo que sucedió y seguir adelante", señaló Mesa con los ojos llenos de lágrimas, fijos en el papel impreso con su nombre y apellido.
"Estaba tan emocionado… ¡que hasta se me trancó el inglés cuando me estaban entrevistando!", añadió con una enorme sonrisa, haciendo referencia a las preguntas que le hicieron los medios de comunicación locales.
Mesa jugó 121 partidos entre las afiliadas de Doble y Triple A de los Yankees con promedio de .264, con 27 jonrones y 67 carreras remolcadas antes de ser convocado a Grandes Ligas a principios de septiembre.
Desde su llegada al plantel mayor, el joven de 26 años, nacido en Bajos de Haina en la República Dominicana, siempre señaló que intentaría aprovechar al máximo todas las oportunidades que se le presentaran, y así cumplió, ya que no sólo tuvo su primer turno en el plato, sino que lo hizo por todo lo alto, conectando un sólido imparable que remolcó la décima carrera de los Bombarderos.
La carrera remolcada por Mesa selló el lapidario triunfo de los Yankees por marcador de 10-2 sobre sus eternos archirrivales, los Medias Rojas de Boston, una crucial victoria para el equipo neoyorquino, que se encuentra en una batalla campal por el liderato de la División Este de la Liga Americana con los Orioles de Baltimore.
"Es algo que no te puedo describir", dijo Mesa, intentando nerviosamente evaluar su propio desempeño. "No puedo decir que esperaba que fuera así o de otra mane-ra, es una emoción grande… ¡y espero que no sea el último!".
"Míralo ahí bien grande", agregó el dominicano bromeando al señalar su nombre en la tarjeta de alineación, añadiendo que ese papel tendrá siempre un lugar de honor en su casa.
"Me voy ahora a celebrar con mi esposa, esto es un día increíble".