Una alerta que merece la atención de todos<br>

Los organismos
oficiales vinculados al sector salud tienen la sagrada misión de desarrollar
una insistente campaña de educación para que los ciudadanos nuestros se
protejan de las enfermedades catastróficas que se producen luego de pasar los
ciclones sobre el territorio nacional.

Es una misión que se
torna a veces difícil porque tenemos la costumbre de hacer poco caso a los
llamados frecuentes de las autoridades para se tomen medidas preventivas y
evitar ser afectados por situaciones de ese tipo, como serían el cólera o el
dengue.

El huracán Sandy causó
daños considerables, anegando muchos hogares, con la agravante de que todavía
existen numerosas zonas en el país inundadas, lo que se convierten en criaderos
de mosquitos, insectos que al parecer son inmunes a los repelentes que se
venden en el mercado local.

El Ministerio de Salud
Pública mantiene a través de algunos medios de comunicación electrónicos una
orientación sobre el manejo de la higiene en los hogares, pero hay muchas
personas que no asimilan esos esfuerzos.

Las
autoridades han alertado al país ante los casos del dengue que pudieran
empeorar la situación por las aguas traídas por el ciclón. En este sentido, Salud Pública ha puesto en
marcha una alerta epidemiológica que debe ser acogida por todos los
dominicanos.

Los
hospitales con frecuencia reciben pacientes, principalmente niños, con síntomas
de la enfermedad. Ese mismo cuadro

se
ha reportado en otros centros asistenciales de las diversas provincias.

El
mensaje del Ministerio de Salud Pública sobre el tratamiento del agua
almacenada a base cloro da sus resultados si la población lo asumiera con
atención. Tenemos muchos ciudadanos analfabetas que por no saber leer ni
escribir no pueden digerir esas orientaciones, de manera que habrá de
utilizarse con más razón la radio y la televisión para esa campaña.

El
asunto es que se están dando problemas de dengue y otras enfermedades
respiratorias que ameritan de una urgencia para evitar males mayores. Esta es
una orientación que debe extenderse a las aulas universitarias, escuelas
públicas, iglesias, partidos políticos, organizaciones sin fines de lucro,
además que debe contar con el apoyo incondicional de los periodistas,
articulistas, comunicadores y la sociedad en pleno porque se trata de un
compromiso de todos.

Los
partidos políticos tienen millones de militantes y simpatizantes, de forma que
se constituyen en una herramienta de primer orden para contribuir con esta
causa. ¿Por qué dejarle la carga al gobierno? ¿Por qué no se unen al sector
oficial para salvar vidas?

La
respuesta es sencilla: políticamente hablando, no les conviene porque su misión
principal es torpedear para sacar provecho a las dificultades de sus
adversarios políticos. Asumen una postura de doble moral y lo politizan todo.
Hay que dejar a un lado ese radicalismo político absurdo, si realmente queremos
salvar vidas, y asumir el compromiso de trabajar para una mejor nación.

El dengue puede en
cualquier momento, por un descuido, tocar la parte más sensible de su hogar,
llevándose de paso a un miembro de nuestra familia. Tomemos el asunto en serio
para que después no lo lamentemos.

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