<b>Los partes meteorológicos indican que el fenómeno tocará tierra cerca de la próxima medianoche en un punto del vecino estado de Nueva Jersey con fuertes vientos y lluvias que también afectarán a la ciudad sede de Naciones Unidas.</b>
Naciones Unidas, 29 oct (PL) Nueva York amaneció hoy en silencio, casi desierta y envuelta en una tensa expectativa ante la aproximación del huracán Sandy y su posible combinación con una tormenta invernal.
Los partes meteorológicos indican que el fenómeno tocará tierra cerca de la próxima medianoche en un punto del vecino estado de Nueva Jersey con fuertes vientos y lluvias que también afectarán a la ciudad sede de Naciones Unidas.
La organización mundial canceló todas sus actividades de este lunes, con posibilidades de extender hasta mañana el cierre de su cuartel general, situado a orillas del East River y en el límite de la llamada Zona A.
Se trata de una categoría oficial que incluye las áreas de la urbe con mayor peligro de inundaciones por la crecida del mar y sujetas a una orden de evacuación obligatoria para casi 400 mil habitantes dictada ayer por el alcalde neoyorquino, Michael Bloomberg.
Desde anoche todo el transporte público (metro, trenes, autobuses y ferris) quedó suspendido, así como las actividades escolares y de otro tipo y el tráfico por la mayoría de los puentes y túneles que unen el condado de Manhattan con Queens, Brooklyn y Staten Island.
Durante la primera parte de la mañana de este lunes Nueva York solo recibe una llovizna intermitente y vientos leves que deben llegar a fuerza de huracán en las últimas horas de la tarde, según los reportes meteorológicos.
Las autoridades advierten a la población sobre la inminencia de interrupciones en el servicio eléctrico y recomiendan el acopio de alimentos y agua para, al menos, tres días.