SANTO DOMINGO.- El vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional para el Cambio Climático y el Mecanismo de Desarrollo Limpio (CNCCMDL), Omar Ramírez Tejada, sugirió a los alcaldes y alcaldesas del país que tomen medidas para convertir a sus municipios en localidades con bajas emisiones de dióxido de carbono (CO2).
En ese sentido, propuso como primera medida cambiar la flotilla de vehículos de los cabildos por otra que no emita cantidades significativas de gases que eleven la temperatura del planeta.
El funcionario informó que tras la reforma fiscal recién aprobada, República Dominicana se convirtió en el primer país caribeño y el tercero de Latinoamérica en crear un impuesto al carbono, con el propósito de desestimular la adquisición vehículos con altas emisiones.
«La idea es atacar la principal causa de enfermedad del pueblo dominican los males respiratorios. La gente se muere porque está respirando dióxido de carbono, por lo que se va a gravar el CO2 a partir de la importación de vehículos, y los fabricantes tienen que decir cuánto dióxido de carbono produce su tecnología por kilómetro, y a partir de ahí se estará gravando», explicó.
También exhortó a las máximas autoridades de los gobiernos locales a trabajar con los dueños de transporte en cada municipio para que la tendencia sea a adquirir vehículos que sean amigables con el medio ambiente.
Ramírez Tejada habló del tema durante la asamblea general que la Federación Dominicana de Municipios realizó de manera extraordinaria este jueves, y en la que fue uno de los oradores invitados. El tema de su conferencia fue “Cambio Climático y Ciudades verdes“.
Indicó que en el informe "Ciudades y cambio climático", que ONU-Hábitat acaba de publicar, se indica que el 51 por ciento de la población mundial se encuentra en ciudades, caracterizadas por el urbanismo y la demanda de servicios, y que en unos 15 años ese porcentaje habrá aumentado a 60%, por lo que la tendencia debe ser a que las ciudades sean cada vez más respetuosas con el ambiente.
Observó que a pesar de que las ciudades solo ocupan el 2% de la superficie del planeta son responsables del 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Al referirse a la categoría de ciudades verdes, dijo que para considerarlas como tales se toman en cuenta ocho factores que miden su desempeño. Estos son la energía y las emisiones de CO2, el uso de suelos y edificios, el transporte, los desechos sólidos, el recurso agua, el saneamiento, la calidad del aire y la gobernanza medioambiental.
Al poner ejemplos de ciudades verdes citó el caso de Belo Horizonte, en Brasil, que es líder en energía solar. Indicó que su nuevo estadio de fútbol construido para la Copa Mundial de 2014 tendrá suficientes paneles solares para generar la energía que necesitará para operar y que venderá a la compañía local de energía el excedente cuando no haya partidos.
También se refirió a Bogotá, en Colombia, que cuenta con 297 kilómetros de rutas para bicicletas, llamadas ciclo-rutas, cifra que la convierte en la red más grande de Latinoamérica; y a Monterrey, en México, que implementó un programa de reciclado en 500 barrios para recolectar desechos orgánicos y no orgánicos en diferentes días de la semana.
El vicepresidente del Consejo Nacional para el Cambio Climático dijo que los ayuntamientos del país tienen en los vertederos municipales una potencial fuente de ingresos, ya que podrían reciclar la basura y generar créditos de carbono si implementan proyectos que eviten que las emisiones del metano de la basura orgánica en descomposición vayan a la atmósfera, incrementando las temperaturas.
Puso como ejemplo el vertedero de Duquesa, en Santo Domingo Norte, donde se ejecuta un proyecto de crédito de carbonos con la quema de metano. Dijo que el próximo paso de ese proyecto será generar ocho megas de energía. “Hoy en día los residuos son dinero si se consiguen reciclar y disminuir los gases de efecto invernadero” aseguró.