Cada
año que pasa parece que avanzamos porque se hacen casas nuevas; se inauguran
obras: barrios, calles, instituciones públicas y privadas.
Por ejemplo, en la
frontera norte, comenzando de ahora para atrás: Escuela del Cesfront, en
Capotillo; carretera Dajabón-Montecristi; Centro Cultural Ensueño Dajabonero;
Mercado Nuevo de Dajabón; Oficinas de la Dirección General de Aduanas y Dirección
General de Migración, en Dajabón; Puente nuevo sobre el río Masacre; Oficinas del Cesfront en el edificio viejo
de Aduanas en Dajabón; más de una decena
de hoteles con más de trescientas habitaciones disponibles; iglesias a gusto
del consumidor; programas de
cable-Visión a escoger; movilidad interurbana a la hora que usted desea; en una
palabra: el mundo en las manos y ante sus ojos en pantallachica o en pantalla grande. Así estamos en
Dajabón.
En
el año 1974, para Usted hablar por teléfono desde Loma de Cabrera o
Dajabón, no lo podía hacer; debía ir a Montecristi o
Santiago Rodríguez; y para ir a Santiago de los Caballeros tenía que hacerlo
por la mañana, porque en la tarde
estaban regresando los vehículos, que habían salido a las 4 de la mañana para Santo Domingo y Santiago.
En
los años 70 del siglo pasado, la comunicación terrestre Dajabón-Santiago era
agobiadora, por la Duarte, por dentro, o por Guayubín, cinco horas de hoyos en
hoyo. Al llegar, el viajero debía cambiarse la ropa. El polvo y el agotamiento
exigían un baño con agua caliente.
Gracias
al crecimiento de la conciencia personal y ciudadana, de los pobladores
fronterizos, dejó de ser mito/miedo el binomio guardia/oficialidad. Ya hemos
entendido que la misión de la Oficialidad no es atropellar, violar, apropiarse
de lo ajeno…, hemos logrado entender que
la misión de la oficialidad es SERVIR, NO-SERVIRSE, aunque vemos que
permanece la impunidad a nivel
nacional, no sólo en la
frontera. Ya las redes sociales forman parte de nuestra militancia
reivindicativa y las calles, las plazas,
son lugares de encuentros que
hablan de nuestra civilidad exigente de administración transparente y
responsable.
Decía
al comenzar que parece que avanzamos porque se hacen “cosas”…, pero aún
permanece algo que tenemos que erradicar en
la frontera domínico-haitiana: el control corrupto, represivo e
individualizado. Ahí parece que no avanzamos. Mejor retrocedemos. Venga usted
un viernes o un lunes para que se convenza. Un ejemplo: el mercado de Dajabón
lleva más de 25 años y a pesar de tener una ESCAFRONT, Escuela de Capacitación
Fronteriza Terrestre. A pesar de tener edificios nuevos para la DGA y para la DGM y para el Mercado…, aún permanece el desorden, la corrupción, la impunidad, el “río revuelto, ganancia de
pescadores” y los que pescan son la oficialidad y los que más saliva tienen.
Por
qué pasa eso? Porque en frontera carecemos de un MARCO JURÍDICO. Aquí estamos
como “chivos sin ley”. Aquí cada
autoridad está para recaudar para el jefe político que lo nombra. Aquí Usted va a plantear algo a la autoridad y si lo puede
ver, si le hace caso lo más que llega es condolerse con
tal situación planteada y
remitirlo a otra institución
oficial o privada
que sí podrán hacer algo por su caso. Y así el uno por
el otro y seguimos igual… El
grito popular es que “aquí no hay autoridad”. Solamente oímos el grito de los ganaderos
que le roban su ganado; el grito de los
atropellos al cruzar la frontera; oímos la bulla insoportable en las calles,
en las barras familiares, en los colmadones, oímos soplos
que salen de los motores
sin mofler.
Es
que podremos hacer algo? Claro que sí.
Hasta ahora hemos buscado salidas, soluciones individuales a problemas comunes. Cada uno quiere salvarse,
“rascándose con sus propias uñas”, olvidándose del otro. Somos continuadores de
la obra de Jesús y nos hemos olvidado de su principal enseñanza: “…al otro como a mí mismo”. Tan simple como lo decimos. Sin más ni más.
Tenemos que iniciar un proceso de
socialización comunitaria, la sociedad consumista nos ha individualizado. Las
enseñanzas del Nazareno de Galilea nos comunitarietizan, bueno, nos hacen
comunitarios. En ese sentido, las asociaciones comunitarias de la frontera
Norte RD y Nordeste H, tenemos que impulsar la COMISIÓN
BINACIONAL DE ASOCIACIONES COMUNITARIAS DE
BASE. Así, enseñar, a las autoridades de cada nación de nuestra isla, a tenerse
en cuenta y hacerles conscientes de que no podemos estar como “chivos sin ley”.
Prescindiendo del otro. Nos necesitamos mutuamente como lo han
dicho los políticos: “alas del
mismo pájaro”, “matrimonio sin divorcio”, “pueblos siameses”. Ni de
espaldas porque nos alejamos. Ni de
frente porque chocamos. Uno al lado del otro para complementarnos. La diversidad
nos enriquece. Aprovechémosla!
Los escarlatas se mantienen en el cuarto puesto tras cortar racha de derrotas SANTO DOMINGO.-…
El presidente Mulino asegura que el Canal de Panamá nunca será negociado. Santo Domingo.- El…
Los aliancistas disfrutaron de un ambiente bailable, cena, bebidas y una suculenta picadera para la…
El presidente de la Fuerza del Pueblo destaca transparencia en el proceso de entrega. Santo…
Pablo Ulloa sugiere medidas para reducir la población preventiva y mejorar el sistema penitenciario. Santo…
Arrestan 853 personas en más de 5,000 operativos y 50 allanamientos en todo el país…