Reaparece Julio Sabala en Ecuador

Una visita maratónica realiza en el país el imitador dominicano Julio Sabala, quien hasta el jueves estuvo en Cuenca, donde participó en la clausura del Festival de Cine La Orquídea (organizado por la Prefectura del Azuay), y ayer estaba previsto su arribo a Guayaquil para participar en la Teletón por la Vida.

Bajo la premisa de que ser comediante no es una profesión, sino una actitud, Sabala brindó en la capital azuaya un show con lo más representativo de sus imitaciones. Este fue parte de su tour de celebración de un cuarto de siglo sobre las tablas y que lo denomina Riso Terapia Total, y que es la antesala del lanzamiento en unos meses más de una producción multimedia y de la inauguración, el próximo mes, de su propio espectáculo en Miami (EE.UU.), con un carácter de cabaré, escena y show.

Sabala se mantiene en producción continua y su espectáculo cambia según el país que visita, por eso está bien informado de la coyuntura actual, en este caso de Ecuador y como un anticipo de su presentación, en rueda de prensa expresó que para venir a este país le dijeron: “si no estás con correa se te caen los pantalones”.

Para este comediante la política es una constante y aún más con la globalización, que a través de internet, las redes sociales y los nuevos medios de comunicación que esta permite, es más cercana la información de lo que pasa en todo país lo que nos vuelve a los seres humanos más próximos y sensibilizados.

“Aquí (en Ecuador) la percepción de la gente, esa incertidumbre nerviosa por lo que se diga, es por el dominio público de que un presidente en un momento, ejerciendo sus derechos como ciudadano decidió interpelar a un medio de comunicación que consideró era muy agresivo y luego todos sabemos lo que esto desencadenó”, dijo el imitador.

Por eso aseguró que, a su criterio, todas las medidas que ayuden con mesura a establecer un molde no son dañinas, pero sí los extremos que advierten o censuran; o cuando se utilizan mal las libertades.

“Los personajes de la vida pública experimentamos permanentemente el contacto con el denominado cuarto poder, por ejemplo, a mí me encantan las entrevistas de radio y televisión porque transmiten lo que uno dice, pero cuando lo hago para la prensa sé que estoy sujeto a un titular bueno para la industria, aunque a veces no sea bueno para mi imagen”, señaló.

Por eso aseguró que todo lo que presentaría en su espectáculo en Cuenca dejaría un mensaje, el que resume un manejo con propiedad y mesura de todos los poderes y libertades.

“El reto a nivel personal, artístico y en todos los niveles de la vida son encontrar el equilibrio y la mesura, porque la ecuanimidad se aproxima a la armonía y a la felicidad, como la democracia ha demostrado ser el orden que se aproxima, aun no siendo perfecta, a la mayor armonía de los pueblos, la alternancia del poder, en favor del progreso”, indicó. 

El dominicano cree que los actores del poder deben entender que no solo representan su corriente política, sino a otros ciudadanos que tienen derechos a los que tienen que representar y que, por lo tanto, la base de la democracia es un invento muy curioso, yo te dejo que estés en el poder, pero puedo tener la posibilidad física de crecer con tus errores, vigilarlos para alimentar mi propuesta y que cuando llegue la elección tener la posibilidad de hacer un mandato al poder y marcar mi posición.

Sin perder la sonrisa, Sabala refirió que en todo tipo de imitaciones existe un morbo espcial de quienes se sienten omitidos y que consiste en saber la versión o percepción del imitador, que hace una caricatura de cómo se registra la colectividad. “Por eso cuando las imitaciones se aplauden es porque se suscriben y la gente se siente identificada”, dijo y expresó que para tener un estilo hace falta tener un sello personal incidiendo en gestos, manías, poses, y formas, cuando las impones tiene estilo y el imitador las codifica al público, para esbozar a su personaje. 

Y en su caso el trabajo es completo, puesto que utiliza su voz, el aspecto físico y eso se convierte en un medio para hacer sus chistes, pero “siempre con buen gusto”, como él mismo lo describe.Personajes

La anterior visita de Julio Sabala al país se registró en octubre del 2011. Entonces imitó a artistas como Roberto Carlos y Julio Iglesias, y recreó a personajes como Chacho Digaga. Él también ha caracterizado, entre otros, a Juan Luis Guerra, Celia Cruz, Pavarotti, José Feliciano y Marco Antonio Solís. 

El artista, a quien se lo conoce como el Imitador de Mil Caras o el Imitador Inimitable saltó a los escenarios a los 13 años, cuando en su natal República Dominicana ganó el Festival de la Voz. Su padre le obsequió entonces una guitarra y afianzó en él sus deseos de incursionar en el arte, el cual lo llevó a integrar el Circo de los Muchachos, primero, e impulsarse en solitario, después.