<b>El cáncer es una enfermedad que año tras año cobra muchas vidas o se prolifera con una intensidad que preocupa a todo el que en su sano juicio,haga causa común con el objetivo de lograr sociedades libres de enfermedades catastróficas.</b>
Cualquiera diría que solo haría falta facilidad, poder o dinero para atender una enfermedad tan mortal y costosa como esta, pero la realidad ha sido otra. Tenemos casos de personas adineradas, donde el cáncer ha sido más fuerte que el dinero o casos donde políticos con facilidades y poder para tratar su enfermedad no han logrado con éxito sus esfuerzos, consecuencias;muerte o inhabilitación.
Ayer nos sorprendió a todos la noticia dada a conocer por el Presidente deVenezuela Hugo Chávez Frías, a quien le diagnosticaron la reaparición decélulas cancerígenas en su cuerpo. Al recibir su diagnostico, el reelectopresidente pidió permiso a la Asamblea de su país para retirarse a Cuba aenfrentar una nueva operación y tratar su condición de salud, dejando comosucesor, hasta su regreso, al actual Canciller Nicolás Maduro.
Desde el año 1998, todo acontecimiento social y político en Venezuela tienealgún vínculo con Chávez, exitosos por demás, sin embargo, su último procesoelectoral, se vio muy marcado por su condición de salud, situación que meremontara a contextos políticos locales en nuestro país. En el año 1998, alDr. José Francisco Peña Gómez, asumió el compromiso de postularse a laAlcaldía, protegiendo debido a problemas internos la organización políticaque fuera su legado político-democrático a República Dominicana, el PRD.
Ambos casos, aunque en sociedades, contextos y coyunturas políticasprácticamente distintas pudieran, según nuestro criterio, marcar el punto departida del deterioro de la vida de ambos líderes en sus respectivasnaciones.
¿Sacrificó Chávez en Venezuela su salud para preservar su modelo de gobiernoe impedir que la férrea oposición hacia él asumiera los destinos de esanación, de la misma forma en cómo en el 1998 Peña sacrificara la suya parasalvaguardar la unidad de su organización política? La pregunta obligada ¿Alfinal este sacrificio político, valdrá la pena? ¿Hasta dónde son capaces dellegar los líderes del mundo por preservar sus modelos de gobierno?
La crítica condición de salud de Chávez y su realidad sé que no le eraajena. Quizás su espíritu aguerrido y su firme convicción de que Venezuelapuede ser mejor lo llevó a ser el actor principal de un proceso electoralque a ciencia cierta no sabe cuál será su costo, pero ¿Por qué no llamó avotar antes por Maduro y protegió su salud? ¿Miedo a ser derrotado por laoposición? ¿Solo con Chávez se salva el socialismo?
Estas son solo algunas de las infinidades de interrogantes que pudieranapoderar nuestras mentes en estos días en los que el shock, atención yoraciones llevan nombre y apellido sonoro, Hugo Chávez. La solidaridad delmundo se expresa minuto a minuto pidiendo por la salud del gobernanteVenezolano, quien al dejar un nuevo sucesor, dejó abierta la posibilidad deabandonar el poder al llamar al pueblo Venezolano a respaldar a NicolásMaduro y a respaldarle si se presentara como candidato en eventualesprocesos electorales venideros.
Ahora resta esperar y orar por la pronta recuperación de nuestro amigo yaliado, el gobernante venezolano, mientras nuestras cuestionantes buscancorrectas respuestas.Amaury Reyna Liberato