<b>DAJABON.- La
realización del acostumbrado intercambio comercial entre dominicanos y
haitianos, se vio interrumpido esta mañana, debido a la actitud solidaria de
los compradores del vecino país con sus compatriotas que eran impedidos de regresar a este
municipio, tras pasarse las navidades en su nación.</b>
A media
mañana de este lunes miles de haitianos permanecían varados en la ciudad de
Juana Méndez, limítrofe con esta comunidad, tras ser cerrado el puente sobre el río Masacre, por donde
habitualmente cruzan en ambas direcciones.
Las
autoridades de Aduanas y Migración aseguraron que impiden el ingreso de los
haitianos que no cuentan con el visado correspondiente, pero estos reclaman se
les permita tal cosa, en vista de que residen en territorio dominicano y fueron
a su país a pasar las fiestas navideñas con familiares y amigos.
Los
obreros que provienen desde diferentes comunidades del Nordeste de Haití
dijeron que laboran en fincas bananeras y de otros cultivos en el Noroeste
dominicano.
Esta
mañana, el sacerdote Regino Martínez Bretón, quien ejerce su ministerio en este
municipio, acompañado de autoridades de Aduanas, Migración y el Cuerpo
Especializado de Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront) trataba de lograr
una solución, por medio de la cual se resolviera el impasse.
Mientras
tanto, la incertidumbre bordeaba a media mañana la realización del mercado
binacional, el que apenas se desarrollaba en un 10 por ciento de su habitual
capacidad.
Desde temprano
en la mañana de ayer la parte dominicana del puente fronterizo, en las
inmediaciones de las Oficinas de Migración, se encuentra fuertemente
militarizada, con un contingente de miembros del Cuerpo Especializado en
Seguridad Fronteriza Terrestre (CESFRONT).
Más tarde fueron integrados miembros del Departamento de Operaciones Especiales
de la Policía,
los que fueron retirados algunas horas después, aunque este lunes fueron
apostados nuevamente en lugares estratégicos.