<b>SANTIAGO.- El arzobispado de esta ciudad
consideró que, a través de la historia, muchos dominicanos han tenido como
conducta honrar con sus labios la memoria de Juan Pablo Duarte, aunque sus
acciones estén divorciadas del pensamiento del padre de la Patria, hasta el
extremo de que, si el forjador de la nacionalidad dominicana viviera en el país
en estos momentos, lo volverían a desterrar.</b>
La apreciación de la jerarquía católica
local está contenida en el editorial del semanario Camino, correspondiente a
este domingo y que con el título de “Nacimiento de la Patria”, analiza el
documento dado a conocer a mediados de esta semana por la Conferencia del
Episcopado Dominicano, con motivo de celebrarse el próximo 27 de Febrero el 169
aniversario de la Independencia Nacional.
Sostiene el vocero escrito de
arzobispado de aquí que con ese mensaje “los Obispos envían un mensaje al pueblo
dominicano que debería ser parte de nuestra vida”.
Después de hacer un minucioso recorrido
histórico de la vida del Patricio Juan Pablo Duarte, nos hablan de su fe,
bujía inspiradora para darse sin reservas a la construcción de la
Patria, los Obispos llaman a
imitar su ejemplo, y hacen énfasis en varios aspectos de la vida del pueblo, relacionándola con la actitud
del fundador de la República.
“Nos exhorta a que seamos verdaderos
políticos como Duarte, y dicen que para muchos la política es
clientelismo, una forma de enriquecimiento o de levantarse un trono en la
historia, pero que para Duarte fue
distinto”, agrega.
Y recomienda estar preparados “para
escuchar la aprobación de este mensaje por parte de
actores, sobre todo muchos políticos que deberían sentir vergüenza al verse retratados por este diagnóstico
hecho por nuestros Obispos”.
“Estamos seguros de que veremos y
escucharemos a muchos de los culpables de los males que padecemos aplaudir
este mensaje, porque su conducta a través de la historia ha sido honrar
a Duarte con sus labios aunque sus acciones estén divorciadas del
pensamiento del Patricio y si Duarte estuviera físicamente entre
nosotros, lo volverían a desterrar”, ratifica.
Al final, Camino hace un llamado a todos
los grupos apostólicos y organizaciones de la
sociedad civil a profundizar y estudiar estas exhortaciones “ya que nos ayudarán a sentar la base de una República
Dominicana mejor, en donde el bien común
sea nuestro norte”.