“Importante, prudente y necesario”, fueron los términos utilizados
por Estados Unidos para avalar la petición del candidato opositor Henrique
Capriles de que se recuenten los votos de las elecciones celebradas el domingo
en Venezuela.
Jay Carney, porta voz de la Casa Blanca dijo que las autoridades
venezolana no deben de apresurarse a una decisión, porque sería inconsistente
con las expectativas de los venezolanos.
Estaña, la Organización de Estados Americanos (OEA) y
observadores internacionales se han sumado también a los reclamos de Capriles,
que ha condicionado reconocer los resultados a que se cuenten de nuevo todos
los votos.
Sobre esa solicitud, el virtual ganador de los comicios, Nicolás
Maduro ha respondido que no tenía problemas en que se vuelvan a contar los
votos.
Mientras que las autoridades electorales de Venezuela han anunciado
que se proponen juramentar a Maduro como presidente de Venezuela en las
próximas horas.