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SANTO DOMINGO.-
El ministro de Agricultura, Luis Ramón Rodríguez, impartió instrucciones a las
ocho Direcciones Regionales de la institución para que se les brinde todo el
apoyo necesario a los más de 650 técnicos que evaluarán los efectos provocados
en la agropecuaria por la tormenta Chantal.</b>
Rodríguez
recomendó que las demás instituciones del sector se integren también, con su
personal, equipo y maquinaria, a las labores de socorro por el paso del ciclón
tropical, así como a los trabajos de levantamiento del informe de las zonas
agrícolas impactadas por las precipitaciones y vientos.
Dispuso
reforzar el suministro de combustibles a las Direcciones Regionales para que el
personal pueda desplazarse sin dificultad a través del campo vehicular
disponible en las diferentes zonas y subzonas agropecuarias del país.
El
funcionario dijo que también se ha puesto al servicio de los equipos técnicos
de evaluación la red nacional de comunicaciones de que dispone la institución,
la cual consta de más de 60 estaciones en todo el territorio.
La
comisión de evaluación de la Regional Sur (Barahona) está compuesta por 70
técnicos; Regional Suroeste (San Juan), 125 técnicos; Regional Norte
(Santiago), 96 técnicos; Regional Norcentral (La Vega), 89 técnicos; Regional
Noroeste (Valverde), 80 técnicos; Regional Nordeste (San Francisco de Macorís),
90 técnicos; Regional Este (Higuey), 70 técnicos y Regional Central (Baní), 60
técnicos.
“Estamos
listos a nivel nacional para hacer una evaluación exhaustiva y acudir en apoyo
de los productores agropecuarios que resulten afectados por los efectos de la
tormenta Chantal”, manifestó el ministro Rodríguez.
Además
de los vehículos para transporte de personal, el funcionario dijo que también
se ha previsto la disponibilidad de equipos pesados para penetrar terrenos que
pudieran resultar dañados, especialmente caminos y carreteras.
Rodríguez
recordó que desde que se anunció el paso de la tormenta por el país, la cartera
agropecuario activó la Comisión de Emergencias Agropecuarias y elaboró un plan
de contingencia para aplicarlo antes, durante y después del paso del fenómeno.
Dicho
plan incluyó una campaña de orientación a los productores agropecuarios para
que tomaran las medidas preventivas de lugar, a fin de proteger propiedades y
evitar pérdidas materiales en sus predios.
Además,
la integración de todo el personal del Ministerio de Agricultura, a nivel
nacional, a los organismos de socorro en las diferentes localidades del país,
para acudir en ayuda de la población que así lo requiera.
La
tercera fase del plan consiste en una evaluación con las informaciones precisas
sobre los efectos negativos dejados por la tormenta, con el objetivo de reponen
en la mayor brevedad los daños provocados en la agropecuaria.
“Con
mucho tiempo de antelación hemos trabajado para que la tormenta no nos
sorprenda desprevenidos”, reiteró el ministro Rodríguez.
