Miguel
Vargas se convirtió en la carta de triunfo del Partido de la Liberación
Dominicana con la firma del nefasto “pacto de las corbatas azules” firmado
clandestinamente con el presidente Leonel Fernández, lo que permitió su
permanencia en el poder con Danilo Medina de candidato.
Para las
elecciones del 2016 Miguel Vargas, apoyado económica y políticamente por el
gobierno del PLD, continuará su rol de quinta columna (traidor) para impedir
que el PRD vuelva al poder. Gracias al trabajo de zapa de Miguel y sus lacayos
(empleados) el PRD ha perdido las elecciones en el colegio de abogados y de los
médicos, reduciendo así la influencia de ese partido en esos sectores de clase
media.
Con los 50 o
60 mil millones de pesos que invirtió Leonel Fernández, el apoyo inmoral de
todos los funcionarios públicos incluyendo la Junta Central Electoral, el
Ministerio Público, las Fuerzas Armadas, la Policía y una buena parte de la
prensa, más la traición de Miguel Vargas y su gente, incluyendo la viuda de
Peña Gómez y de algunos compadres, Hipólito Mejía obtuvo un 47 % de los votos.
¡Una hazaña!
Solo
robándose las elecciones, comprando la voluntad popular sin importar el
déficits fiscal de 200 mil millones de pesos y provocando la traición de un
sector del PRD, pudo el PLD mantenerse en el gobierno. De otro modo Hipólito hubiera barrido. Y si
en la República Dominicana no se produjo un baño de sangre, con cientos de
muertos y miles de heridos, se debió a la posición conservadora y pacífica de
Hipólito, con la que nunca estuve de acuerdo.
Con el apoyo
económico y político de Leonel y Danilo, el presidente de facto del PRD ha
violado y sigue violando, los estatutos del partido. Ha sustituido o expulsado
dirigentes vitalicios como Hipólito Mejía. No convoca los organismos como
mandan los reglamentos internos. En el PRD Miguel es ley, batuta y
constitución. Miguel apoya al gobierno, como lo hizo con la sentencia del
Tribunal Constitucional, y el gobierno apoya a Miguel. Es un pacto. Un amor de
dos vías, una sociedad económica y política. Es por eso que ahora Miguel dice
que la convención del PRD no será en febrero, sino en julio o junio. Es decir,
cuando le dé la gana. Es por eso que Miguel está preparando un padrón único y excluyente.
Sabe que recibirá el respaldo del gobierno a través del Tribunal Superior
Electoral y de la Policía, en caso de ser necesario. Como ha ocurrido. Miguel y
sus socios del gobierno saben que no podrán ganar nunca unos comicios en el
PRD. En la convención serán barridos no importa cuántos miles de millones de
pesos inviertan, ni cuándo la hagan. ¡No pasaran! Por eso el traidor no convoca
a los organismos, ni le pone fecha a la convención. Precisa de tiempo.
Recientemente
Hipólito dijo en un acto multitudinario, que está trabajando en un frente
opositor en contra del mantenimiento del PLD en el gobierno, con o sin el PRD
de los traidores que encabeza Miguel.
Desde hace
tiempo vengo insistiendo en un acuerdo político electoral y popular que agrupe
a todas las fuerzas de izquierda, centro y derecha preocupadas por la situación
del país. Sin sectarismos. El país está por encima de los intereses de los
líderes, de los partidarios y los grupales.
Un frente
político electoral de oposición, amplio, reducirá al PRD de los traidores a
nada. Las masas se volcaran a favor de los candidatos de ese frente para ganar
la presidencia de la República, el Congreso y los ayuntamientos. Luego podrá
convocar al pueblo a una Asamblea Constituyente para hacer los cambios y transformaciones
que demanda el Estado.
Miguel
Vargas es la carta de triunfo del gobierno de Leonel y Danilo, junto a los
recursos del Estado y los funcionarios corruptos.
La carta del
triunfo del Frente Opositor encabezado por Hipólito Mejía, será el pueblo. El
Soberano.
“¡Manos a la
obra!”
“¡Ahora es!”