El Balón de Oro entregado
a Cristiano Ronaldo lo define como el mejor futbolista del 2013, dejando atrás
a Lionel Messi y al francés Frank Ribéry. El entusiasmo ha sido desbordante por
la elección de quien además de buen atleta, es un galán fuera y dentro del campo
de juego.
Autor de 69 goles en 2013
con el Real Madrid y la selección nacional de Portugal, tenía este premio como
una obsesión personal desde hace casi un quinquenio.
Lo
recibió con lágrimas en los ojos, el luso, también recordista en goles en la
primera etapa de la actual Liga de Campeones, agradeció a todos sus compañeros
de club y de selección, y lo consideró un honor.
Es la
primera vez que invito a mis familiares, confesó el astro, que ya ganó el
premio en 2008 cuando aún jugaba en el Manchester United y ganó la Premier
League, la Liga de Campeones y el Mundial de Clubes.
El portugués aventajó en
la votación al argentino Lionel Messi y al francés Franck Ribéry, quienes
estaban presentes en la ceremonia.
Messi, ganador del Balón
de Oro en las cuatro ediciones precedentes (un récord), es considerado por
muchos el mejor futbolista del mundo, pero no tuvo una gran temporada personal
y colectiva.
Ribery,
el líder del equipo que ganó casi todo, porque al Bayern sólo le faltó la
Supercopa alemana para lograr los seis títulos que disputó en 2013, era el otro
gran candidato al galardón.
Minutos
antes, la portera alemana Nadine Angerer conquistó el Balón de Oro a la mejor
futbolista del año en 2013.
Estoy
muy orgullosa y quiero agradecer a quienes me eligieron, y le expreso mis respetos
a las otras nominadas. Esto no lo pude lograr sola, agradezco también al equipo
y la entrenadora, declaró Angerer.
Las
otras nominadas eran la brasileña Marta Araújo y la estadounidense Amy Wambach.