En entregas anteriores hemos planteado el Patrimonio Productivo Nacional (PPN)
de la siguiente manera: (1) Patrimonio Empresarial de la Era de Trujillo – (2)
Empresas del Sector Privado (Bienes y Servicios) – (3) Empresas del Sector
Público creadas después de la muerte de Trujillo – (4) Construcciones y/o obras
de infraestructura, y (5) Gasto social o productivo relacionado con lo
anterior.
El Presupuesto General del Estado (PGE) del año 2014 asciende a unos RD$613,000
millones de pesos. El Patrimonio Productivo Estatal (PPE) es una derivada del
PGE y/o Ley de Gastos Públicos, como se le quiera llamar. Tanto el
PPE como el PGE tienen como radio de acción las Páginas Amarillas (Sección
Gobierno) que representan al Estado que se identifica con todos los puntos del
PPN, menos el #2 – Empresas del Sector Privado.
El grado de productividad del Patrimonio
Productivo Nacional (fuerte, débil o
ninguno), viene dado en función de su #2
(Empresas del Sector Privado), seguido
de los otros puntos; y también en función del Patrimonio Productivo Estatal,
con la diferencia de que este último no toma en cuenta el #2 del Patrimonio
Productivo Nacional para calcular la productividad del Estado, aquella que se
deriva del Presupuesto General del Estado que toma en cuenta las Páginas
Amarillas (Sección Gobierno) y otras variables fuera de ellas (Ref./Google:
Apuntes de Historia Económica Dominicana).
Lo anterior destaca la existencia
de dos tipos de productividad: (1) La que se calcula partiendo del Patrimonio
Productivo Nacional (PPN). Es el caso de la Productividad Nacional. Y (2), la
que se calcula partiendo del Patrimonio Productivo Estatal (PPE). Es el caso de
la Productividad Estatal. La primera tiene su radio de acción dentro del Producto
Interno Bruto (PIB) y la segunda dentro del Presupuesto General del Estado
(PGE) que toma en cuenta las Páginas Amarillas (Sección Gobierno) y otras variables
fuera de ellas.
Los puntos #2, #4 y #5 del Patrimonio
Productivo Nacional son los de mayor variación (sin que esto signifique dinamismo),
en comparación con su #1 y #3, a la hora de calcular la productividad del
Patrimonio Productivo Nacional. De igual manera, los puntos #4 y #5
reflejan una mayor propensión al gasto oficial, lo que hay que tener en cuenta
a la hora de calcular la productividad del Patrimonio Productivo del Estado.
No olvidemos que RD$613,000 millones de
presupuesto (PGE) es cualquier cosa. Es una respetable suma que debe usarse
para promover la inversión y no el gasto (como parece ser la norma), lo que convierte al Estado en “ente
improductivo”. Su clásicolado opuesto es la Era de Trujillo que hizo de la
República Dominicana el Gobierno más rico de América al ser el Estado el dueño
de la maquinaria productora del país.
Mientras, el periódico Diario Libre de
fecha 24/12/2013 (Antes Meridiano) nos da una idea del #5 del PPN. Cito uno de
los párrafos: "Bajar los índices de hambre en el país a base de programas
de asistencia es literalmente pan para hoy y hambre para mañana" (cierro
la cita). Por eso defino el #5 del PPN como “gasto social o productivo
relacionado con todo lo anterior”. Lo que afirma Diario Libre es una forma de
interpretar esa definición para entender la productividad del Estado.
Otra idea del #5 del PPN es la
siguiente. El economista Eduardo García Michel define un decálogo sobre la
revolución del desarrollo o el milagro económico dominicano. El III #7 del
decálogo dice: “Reprogramar el gasto público dándole mayor racionalidad y
elevar la inversión y el gasto social, no necesariamente asistencial” (Ref.
“Panes, Peces y Milagros”. Diario Libre. 4/2/2014).
Vistas las cosas de esta manera, dentro
del #4 y #5 del PPN se podrían identificar otros gastos que nada tiene que ver
con la productividad, entre otros que dependen de la transparencia institucional. Son gastos que
convierten el PPE y el PGE en un círculo vicioso de alto costo. Todo esto hay
que tomarlo en cuenta a la hora de calcular la Productividad Nacional (PPN Vs.
PIB) y la Productividad Estatal (PPE Vs. PGE) para evitar que el Bienestar
Nacional se diluya "como el agua entre los dedos” o se torne “sujeto de
algarabía mediática”, contrario a una política de Estado, como podría ser la
productividad.
Si partimos del Patrimonio Productivo
Nacional (PPN) podemos observar algunos títulos dentro de las Páginas Amarillas
(Sección Gobierno) que guardan relación con la productividad. Por ejempl
Banco de Reservas, Banco Agrícola, Corporación Dominicana de Empresas
Eléctricas Estatales, Consejo Estatal del Azúcar, Instituto Dominicano de
Tecnología Industrial, Ministerio de Industria y Comercio, Ministerio de Obras
Públicas, Ministerio de Turismo, Dirección General de Minería, Fondo Especial
para el Desarrollo Agropecuario.
También el Instituto Agrario Dominicano,
Ministerio de Agricultura, Instituto Nacional de Aguas Potable y
Alcantarillado, Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y el Centro
Dominicano de Promoción de Exportaciones.
Esos títulos forman parte de una
“dispersa base productiva nacional” de la que todavía no hay conciencia. Es una
plataforma que debe revisarse para fortalecer el grado de productividad del
Patrimonio Productivo Estatal en función del Presupuesto General del Estado,
para impactar el Bienestar Nacional como lo hace el #2 (Empresas del Sector
Privado) del Patrimonio Productivo Nacional.
Resumiendo, la Productividad Nacional no
es solo el Patrimonio Productivo Nacional basado en la creación de "Bienes y
Servicios de Empresas Públicas y Privadas", conjuntamente con
"Construcciones/Obras de infraestructura". La Productividad Nacional
depende mucho de los puntos #4 (Construcciones) y #5 (Presupuesto y/o
Gastos del Estado), vislumbrando el Patrimonio Productivo Nacional dentro
de las Páginas Amarillas a la hora de preparar el Presupuesto General del
Estado para calcular la productividad del Patrimonio Productivo Estatal, asunto
que está por verse.
Hay que tener mucho cuidado con lo que
suceda dentro o fuera de esas Páginas Amarillas para que al Estado no
le pase “lo mismito” que le pasó al Patrimonio Empresarial de la Era de
Trujillo (#1 del PPN), que “desapareció” con la muerte del Perínclito de San
Cristóbal. Por eso la importancia del cálculo de la productividad (Nacional –
Estatal) para determinar responsabilidades y preservar los mejores intereses de
la Nación.
Esperamos algún día coincidan el Patrimonio
Productivo Nacional y el Patrimonio Productivo Estatal, donde el Presupuesto
General del Estado es el factor determinante. Tal coincidencia es una
forma de fortalecer el Bienestar Nacional traducido en mayores niveles de
empleo y drástica reducción de la pobreza extrema. Es la mejor vía para entender
el concepto de Estado nación (Ref./Google: "Estado nación o subido en el
palo") que evite la pérdida de nuestra soberanía por culpa de nosotros
mismos, como sucedió en 1916 cuando los norteamericanos ocuparon Rep.
Dominicana “por mala paga”.
Pero no todo está perdido si
buscamos la luzal final del túnel o surgen opciones diferentes a las antes
señaladas. Por eso es grato saber sobre la estrategia compartida (twin
strategy) del Banco Mundial que involucra los sectores público y privado para
combatir la pobreza en el mundo. La meta es reducir a un 3% el nivel de pobreza
para el año 2030 y de aumentar los ingresos del 40% de los grupos más
empobrecidos de cada país.
Parece que el Banco Mundial se ha dado
cuenta que los programas que dirige en los países en desarrollo, en cierto modo
se ven afectados y disminuidos por la “atomización burocrática enclavada en las
entidades públicas", como ha sido la tradición en muchos años (Ref. “Un
nuevo enfoque sobre la población”. Listín Diario. 31/1/2014). El Banco Mundial
entiende que el sector privado es el responsable de crear el 90% de los empleos
a nivel mundial.
Es por eso la importancia del cálculo de
productividad (Nacional – Estatal) para aumentar el empleo y
disminuir la pobreza en nuestro país. El cálculo es la diferencia que
distingue entre democracias y dictaduras "de tierra firme" y
democracias y dictaduras "de tierra movediza". Lo mismo aplica a todo
tipo de ideología en cualquier parte del mundo para distinguir entre “gobiernos
idealistas” y “gobiernos realistas”. Con la pobreza no se juega.
@luisEDazFranjul