5 de marzo 2014.-Asediado
por las protestas internas, el presidente Nicolás Madura trata de evitar a toda
costa que los cuestionamientos a su gobierno tomen cuerpo en los organismos
multinacionales, como la Organización de Estados Americanos (OEA).
Por eso
hoy, con un tono amenazante rompió relaciones políticas y diplomáticas con
Panamá y de paso advirtió que será duro con cualquier país de América Latina
que intente entrometerse en los asuntos internos de Venezuela.
Las
decisión del gobernante bolivariano ocurren cuando se anuncia que el jueves
habrá una sesión del Consejo Permanente de la OEA para discutir la situación
política de Panama, donde las protestas han dejado unos 19 muertos, decenas de
heridos, cientos de apresados y opositores perseguidos.
Maduro,
que es visitado por varios mandatarios que acudieron a Venezuela al primer
aniversario de la muerte del presidente Hugo Chávez, ha insistido en que en
contra hay una conspiración de Estados Unidos, lo que Washington ha negado y ha
dicho que son pretexto del mandatario venezolano a quien ha instado a escuchar
los reclamos de su pueblo.
"Frente
a la conspiración abierta del embajador del gobierno panameño en Washington en
la OEA he decidido romper relaciones políticas y diplomáticas con el gobierno
actual de Panamá y congelar todas las relaciones comerciales y económicos desde
este momento", dijo Maduro durante una ceremonia de conmemoración del
primer aniversario de la muerte de Hugo Chávez.