<div><span style="font-size: 12px;">Por que era acusado de corrupto, el primer ministro de Turquía ordenó bloquear la red social Twitter, pero esta ha contratacado proveyendo a sus usuarios de códigos para que sigan enviando sus comentarios.</span></div><div><br></div><div>Es una batalla entre un gobierno que se resiste a explicar sus actos a la ciudadanía y tuiteros que lo reclaman.</div><div><br></div><div>“Suprimiremos Twitter. Y no me importa lo que diga la comunidad internacional”, había dicho Erdogan en un multitudinario acto por los comicios municipales del 30 de este mes. A comienzos de marzo, el primer ministro había amenazado también con prohibir YouTube y Facebook. </div><div><br></div><div>En tanto, el presidente turco, Abdullah Gül, intentó hoy desmarcarse de la decisión y rechazó el bloqueo mediante una serie de mensajes enviados precisamente desde su propia cuenta en esa red social. "No estoy de acuerdo con el cierre total de las plataformas sociales", señala uno de los tuits del presidente. </div><div><br></div><div>"Además ya se ha evidenciado varias veces que técnicamente ni siquiera es posible cerrar completamente plataformas como Twitter, que se emplean en todo el mundo", agregó en una clara muestra de que, en efecto, el bloqueo no afectaba a su propio ordenador. </div><div><br></div><div>"Espero que esta situación no dure", concluyó el presidente turco, quien se está alejando cada vez más de su viejo aliado, el primer ministro el islamista Erdogan. </div><div><br></div><div>Tampoco el viceprimer ministro pareció no haberse dado cuenta del cierre, al enviar hoy un tuit en el que anunciaba su agenda del día, y también otros altos cargos del partido gubernamental hicieron caso omiso a la medida.</div><div><br></div><div>Por su parte, la comisaria europea para las Nuevas Tecnologías, Neelie Kroes, condenó el bloqueo. “La interdicción de Twitter en Turquía está privada de todo fundamento, es inútil, es vil, escribió Kroes en la red social. El pueblo turco y la comunidad internacional verán esto como una censura. Cosa que es verdad”. Paradójicamente, varios tuits resumieron el discurso de dos horas en la cuenta oficial de Erdogan. Es popular en la red que pretende borrar, con más de cuatro millones de seguidores en Twitter.</div>