Varsovia, 28 abr (PL) En contra de entendimientos pactados con Rusia por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el ministro polaco de Defensa, Tomasz Siemionek, demandó hoy una estructura estable de ese bloque en este país.
Siemionek estimó que la alianza atlántica debería instalar un sistema antimisiles en la norteña localidad de Redzikowo o crear una base aérea en el central poblado de Lask, donde hace varias días se encuentran varios cazas F-16 estadounidenses.
El titular polaco de Defensa expresó en un artículo del diario Gazeta Wyborcza que era necesaria una presencia permanente de la OTAN en este territorio, algo que Moscú considera perjudica a su seguridad nacional y capacidad disuasiva.
Medios de prensa recuerdan las promesas hechas a Moscú por el mando del pacto noratlántico en la década de 1990 de evitar cualquier despliegue de tropas en territorios de sus nuevos miembros, en su mayoría, países exsocialistas europeos.
Durante una cumbre Rusia-OTAN, efectuada en 2010 en Lisboa, los 28 miembros de ese bloque militar se pronunciaron públicamente por estrechar la cooperación con Moscú, mientras en el circulo estrecho de la alianza esbozaban planes de contención contra Rusia.
Ello incluía el refuerzo de la presencia de aviones de combate en las repúblicas exsoviéticas con costas en el Báltico y de sistemas antimisiles y tropas de la alianza en Polonia y la República Checa, destaca la prensa local.
El gobierno polaco justifica ahora sus pedidos a la OTAN con la posición asumida por Moscú de apoyar un referendo sobre la independencia de Crimea y su regreso al seno de la Federación de Rusia, al cual perteneció hasta 1954.
La decisión de los crimeos de separarse de Ucrania se registró, después que el pasado 22 de febrero fuerzas ultraderechistas llegaron al poder mediante una ruptura del orden constitucional que obligó la salida del presidente legítimo Viktor Yanukovich.
Estados Unidos, con unos 67 mil militares en Europa, trasladó 150 uniformados a esta nación en los últimos días como respuesta simbólica a demandas de Varsovia.
Durante la confrontación este-oeste de la Guerra Fría, el Pentágono llegó a contar con hasta 350 mil hombres sobre las armas en el Viejo Continente.
Analistas locales consideran que la crisis ucraniana es usada como pretexto de potencias occidentales para justificar la propia existencia de la OTAN, cuyo papel en la lucha antiterrorista global era cada vez más difícil de justificar.
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