Durante un taller celebrado se explicó la ventaja en el uso de residuos orgánicos para general electricidad.
SANTIAGO.- El país se economizará cinco millones de dólares anuales en importación de combustibles fósiles y dejará de emitir a la atmósfera un millón de toneladas de dióxido de carbono equivalente cada año, con el aprovechamiento de la mitad de los residuos orgánicos para la generación de electricidad a través de la digestión anaeróbica.
La información la ofreció el vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional para el Cambio Climático y el Mecanismo de Desarrollo Limpio (CNCCMDL), Omar Ramírez Tejada, al participar en la apertura del taller “Operaciones de rellenos sanitarios y captura y utilización del biogás”, que se imparte hasta este viernes 9 de mayo en el hotel Hodelpa en Santiago.
La actividad ha sido organizada por el Consejo Nacional para el Cambio Climático, en coordinación con la Liga Municipal Dominicana y el Ayuntamiento de Santiago, con el apoyo técnico de la Iniciativa Global de Metano y la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (US- EPA).
Al taller asistieron el presidente del Concejo de Regidores del Ayuntamiento de Santiago, Rafael Cruz, quien dio la bienvenida; Domingo Contreras, coordinador nacional de Política de Residuos Sólidos y asesor del Poder Ejecutivo; Paul Ruesch, de la US- EPA; Víctor Feliz, de la Liga Municipal Dominicana, así como alcaldes, alcaldesas y delegados de distintos cabildos.
Ramírez Tejada indicó que el país, como socio de la Iniciativa de Metano y en consonancia con la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030 y el Plan de Desarrollo Económico Compatible con el Cambio Climático (Plan DECCC), gestiona que el 30% de los basureros a cielo abierto se conviertan en rellenos sanitarios equipados con sistemas de recolección de biogás para la generación de electricidad.
Ese proceso es liderado por el CNCCMDL en alianza con la Liga Municipal Dominicana, la Federación Dominicana de Municipios (FEDOMU), el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales y la Red Nacional de Apoyo Empresarial a la Protección Ambiental – ECORED, entre otras.
Recordó que el país, a través de la Estrategia Nacional de Desarrollo, tiene el compromiso de reducir al año 2030 sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 25% tomando como línea base el año 2010, como una de sus estrategias para contribuir a enfrentar el cambio climático.
De su lado, el presidente del Concejo de Regidores de Santiago agradeció a la Presidencia de la Republica, a través del CNCCMDL, por sus encomiables aportes en el tema del manejo de los desperdicios sólidos, al tiempo que sostuvo que Santiago no puede postergar más el aprovechamiento del metano que se desprende de los desechos orgánicos.
En tanto, Contreras, sostuvo que el país no tiene otro camino que pasar del caos de la basura a la industria de los residuos sólidos. “Cuando un país asume manejar apropiadamente sus residuos sólidos genera las normativas y los flujos financieros para hacerlo. Por eso nosotros planteamos que hay que pagar por cada tonelada que un ayuntamiento deposita en un destino final, y que lo coloque en su presupuesto. Tenemos la obligación como país de crear un mecanismo integral de residuos sólidos”, sostuvo.
Entre los temas que se abordan en el taller están importancia del manejo adecuado de los rellenos sanitarios, operación de rellenos sanitarios, fundamentos del biogás, su captura y aprovechamiento, y tienen programada realizar una visita al vertedero de Rafey este viernes.
Sobre la Iniciativa Global de Metano (GMI)
La Iniciativa Global de Metano (GMI, por su sigla en inglés) fue lanzada el 1 de octubre de 2010, por 37 países (entre ellos República Dominicana), la Comisión Europea, el Banco de Desarrollo de Asia y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), instando a una fuerte acción internacional para luchar contra el cambio climático mientras se desarrollan energías limpias costo-efectivas en el corto plazo y la entrega de beneficios a la salud humana, el medio ambiente, y al desarrollo económico sostenible.
El metano representa aproximadamente el 18% del total de la contribución antropogénica al calentamiento global que se experimenta actualmente. Es un potente gas de efecto invernadero (GEI) que permanece en la atmósfera un período de tiempo relativamente corto. Por lo tanto, la reducción de las emisiones de metano hoy rendirá beneficios sustanciales al clima en el corto y mediano plazos.