Observa que el régimen de nacionalidad, ciudadanía y extranjería solo puede ser cambiado mediante referendo aprobatorio
La Fundación Justicia y Transparencia (FJT), por intermedio de su Presidente Trajano Vidal Potentini, afirmó hoy que tal como está redactado el proyecto de Ley de Naturalización, aprobado recientemente por la cámara de diputados en dos lecturas consecutivas viola la Constitución de la República y la Sentencia TC/0168/13.
De acuerdo a Potentini, es preferible revisar con calma el referido proyecto y modificar las partes que deban modificarse, porque ahora mismo es lo que más se asemeja a una ley de amnistía general, tal como resulta de la combinación de los artículos 2 y 5 del Anteproyecto en cuestión.
En ese sentido, el Art. 2 del Anteproyecto ordena a la Junta Central Electoral reconocer que acredite como nacionales dominicanos a todas las personas cuyos documentos no hayan sido reconocidos por las leyes vigentes.
La FJT hace votos porque las autoridades nacionales resuelvan el problema migratorio a la luz de las leyes ya existentes, especialmente la Núm. 285-04, creada a propósito para regular el ingreso y permanencia de extranjeros en el territorio dominicano. Recordó Potentini que también existen leyes reguladoras de la naturalización, como la 1683 de 1948, cuyas normas disponen ya cómo deben las personas naturalizarse de manera ordinaria.
En similar sentido, Potentini hizo notar que el Art. 272 de la Constitución es muy preciso al ordenar que el régimen de nacionalidad, ciudadanía y extranjería solamente puede modificarse a través de referendo aprobatorio convocado por la Junta Central Electoral y cuyo resultado debe ser aprobado por el Congreso Nacional. En otras palabras, son temas indisponibles para el legislador, ordinario e incluso para el constituyente.
En consecuencia, afirma el reconocido jurista, hay reserva constitucional sobre el tema en discusión, por lo que el legislador no es competente para decidir el cambio del régimen de nacionalidad, ciudadanía y extranjería.
Se critica el hecho de que el documento sometido al Congreso Nacional es escueto y de escasa riqueza en detalles, necesarios por la magnitud del problema, que supone muchos casos diferenciados y complejos, y en general, que pretende resolver el problema migratorio dominicano en diez artículos, de trece con los que cuenta en total.
La FJT lamenta que la clase política dominicana no esté jugando su rol y haya dado su visto bueno sin reparar en las graves consecuencias que puedan ocasionar las buenas intenciones, el deseo de superar los problemas y el cansancio con un tema aparentemente de tan difícil solución.
A fines de evitar futuras complicaciones jurídicas, opina Potentini que es necesario propiciar una solución que respete la Constitución, la interpretación constitucional y las leyes sobre migración y temas vinculados, de manera tal que no se violen las leyes ni se propongan amnistías migratorias generales, como parece ser el espíritu del proyecto sometido al Congreso Nacional.