Los partidos políticos integran en su seno a una parte minúscula de la sociedad dominicana. Ningún partido es la totalidad del conglomerado, sino un reflejo de el.
Por Manuel Hernández Villeta
El fraccionamiento de un partido político podria ser un hecho relevante, pero ello no significa que vaya a perder unas elecciones. Esa división en todo caso sería de la cúpula dirigencial, pero no de la mayoría de sus miembros.
En la historia política dominicana los partidos emergentes de divisiones no han llegado a ninguna parte, se han quedado como simples rémoras que tratan de subsitir en base a buscar la presidencia de la república, con un movimiento de apoyo prácticamente moribundo.
La verdadera fuerza electoral descansa en el pueblo. La opinión mayoritaria de la población, que no tiene militancia partidista, es la que da el triunfo o decreta la derrota.
La mayoría de los partidos políticos se revuelven en la salsa de sus militantes, pero en ningún momento dan la cara en buscar nuevas opciones, en ir donde el pueblo que vota cada cuatro años, pero que luego no ve el partidismo como una necesidad personal, ni siquiera colectiva.
La unidad de un partido político si es vital para mantener el espíritu de combate, para poder llevar un frente organizado y para ejecutar trabajos que atraigan a las grandes masas.
El fantasma de la división está hoy presente en uno de los grandes partidos, el Revolucionario Dominicano. La erosión interna sacude a sus dirigentes, y destruye su maquinaria con miras a participar en las elecciones para escoger al próximo presidente.
Parecería que el PRD tiene un eterno camino de división, donde las aspiraciones de sus principales dirigentes los lleva a enfrentarse, por tratar de ocupar a como de lugar la candidatura presidencial.
En el Partido de la Liberación Dominicana el tema central es regreso o continuidad. Allí está todo. Retorna Leonel o sigue Danilo. Puede haber un tercero, pero en base al consenso de los dos únicos que tienen fuerzas.
El continuismo o el regreso no son los deseos o la posición de un líder. Sólo el pueblo votando en forma liberrima, podrá determinar el mejor camino a seguir. Ahora mismo solo queda dar los pasos iniciales, falta todavía mucho terreno por recorrer…..