Alicia Bárcena secretaria ejecutiva de la Cepal reconoció que la IED no creó capacidades productivas para fomentar empleo, mientras las compañías transnacionales que llegaron a la región remiten a sus países las ganancias lo cual supone peligros de vulnerabilidad financiera.
Santiago de Chile, 29 may (PL) La Inversión Extranjera Directa (IED) superó su marca histórica en América Latina y el Caribe en 2013 con 184 mil 920 millones de dólares, pero se ralentizó la creación de empleos, dijo hoy la Cepal.
En rueda de prensa en la sede regional aquí de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), su secretaria ejecutiva, Alicia Bárcena, destacó el incremento de la IED en la zona en un cinco por ciento en relación con 2012.
Sin embargo, Bárcena reconoció que la IED no creó capacidades productivas para fomentar empleo, mientras las compañías transnacionales que llegaron a la región remiten a sus países las ganancias lo cual supone peligros de vulnerabilidad financiera.
Desde 2003 la IED hacia esta área geográfica ha crecido continuamente, salvo en 2006 y 2009, aunque respecto al tamaño de las economías se ha mantenido prácticamente estable desde 2011, explicó.
Añadió que en los dos últimos años, la expansión económica se ha ralentizado y los precios de los metales han caído, por lo que la Cepal proyecta que en 2014 las entradas de IED caerán levemente.
La secretaria ejecutiva de la entidad de Naciones Unidas subrayó, no obstante, que "se ha vuelto un mantra decir que la IED es importante porque va a generar empleo y que va a hacer partícipe a la población de los frutos del crecimiento".
Pese a lo anterior, el organismo observa que las empresas transnacionales muestran todavía gran interés por el crecimiento a largo plazo del consumo en la región y por la explotación de los recursos naturales.
El estudio concluyó que el 82 por ciento de las corrientes de IED se dirigen hacia las seis principales economías latinoamericanas, aunque en términos relativos son más relevantes en las pequeñas, especialmente las del Caribe.
Al respecto apuntó que Brasil recibió el 35 por ciento de la IED en 2013 con 64.046 millones de dólares; y México es el segundo, con 38.286 millones de dólares.
"En la última década, la inversión extranjera directa en América Latina y el Caribe se ha multiplicado por cuatro, pero es necesario analizar su papel frente al cambio estructural para la igualdad", comentó la funcionaria.
Creemos que estos ingresos deberían ser parte de los procesos de diversificación productiva que están llevando adelante los países de la región, puntualizó.
En el reporte, la Cepal señaló a Europa al frente de los inversionistas, con enorme incidencia en Brasil y México. Estados Unidos, por su parte, es el mayor inversor individual.
Resalto, de otro lado, el papel de las empresas transnacionales latinoamericanas, conocidas como translatinas, que no pudieron avanzar pero mostraron gran dinamismo.
De las translatinas tuvieron el mejor desempeño México (16), Brasil (14), Chile (11), Colombia (6), Argentina (2) y Venezuela (1). Estas se han internacionalizado en industrias básicas (hidrocarburos, minería, cemento, celulosa y siderurgia.
ale/ft