Los venezolanos y los afrodescendientes

Por más que lo quieran imponer…, Los venezolanos no aceptamos que nos llamen afrodescendientes.

Por Brunilde Palacio.

Las prácticas que conllevó a que los   sujetos que poseen una piel negra fueran convertidos en piezas de ébanos, no deben ser oscurecidas, puesto que ellas reflejan  la lógica de la dominación, en el que no se tomó en cuenta que eran humanos que poseían una alta capacidad para discernir, sino la ambición de convertirlos en piezas para el intercambio que podían ser intercambiados cualquier asiento o factoría de la África Tribual que sirvieron de base para la implantación de la explotación, aislamiento de la mujer negra y del hombre de pigmentos negros, transformándose en una economía orientada a mantener la solemnidades y el proceso de acumulación que sirvió de base para que se fortaleciera tal proceso, como transito que abrió las puertas para que se originara el Capitalismo (Cuestión que siempre se ha querido oscurecer que demuestra que sin la instauración del Sistema de la Trata Negrera por los europeos y la participación de los africanos, jamás se fuera originado el capitalismo liberal en el mundo.

Esto representa que su nacimiento se va a dar a través de la acumulación no originaria de capital, sino de la fuerza física que trajo como consecuencia su expansión y su perduración en el tiempo, porque así como en Libia, Iraq, Siria, etc., no importaba bombardear a seres humanos sin ninguna consideración con toda la nueva tecnología, sino la expropiación de sus recursos naturales en base  a una premisa utópica de poder, así igualmente sucedió con esta acumulación de seres humanos, a los cuales se les convirtió en objetos en base a un silogismo jurídico, se les quitó su capacidad, se inhabilitaron y se les consideró una propiedad que solamente era usufructuada por sus dueños y para ello eran marcados con la carimba o calimba[1], el instrumento de hierro o plata que era usado por compañías de diferentes nacionalidades dedicadas a la Trata, el cual  se practicaba con todo aquel ser humano que fue calificado o estereotipado como negro o negra, independientemente de su sexo y edad, y se hacía en hombros, pechos o espalda (no como africano), que después de aplicado, se les echaba encima de la marca aceites, polvos o pimentadas con el objetivo de facilitar la cicatrización.), en el que la apropiación de su fortaleza física para el desarrollo del trabajo manual se hizo inherente y sobresaliente, en el que no se ha querido reconocer su contribución y papel jugado en la construcción de los nuevos estados-nación que se estaban formando en el mundo. Pero lo más delicado de este segmento de tiempo (que tuvo aproximadamente más de cuatrocientos años), fue la conducta asumida por las culturas africanas, los cuales se dieron a la tarea de desarraigar a su propia para no reconocerlos como africanos, sino como negros, descalificarlos para no reconocerlos, sino como un producto o piezas que  por su fortaleza física eran utilizados solamente para el trabajo que ameritaba fuerza en ese tránsito que implico fortalecer a los países imperios que ya habían transformado sus estructuras y creado las bases hacia la consolidación del Capitalismo Liberal que nace con la revolución industrial y los aconteceres que sucedieron en Francia…, quienes soportaron en sus hombros todas las implicaciones que se originaron a través del proceso que implicó el desarraigo, causada por la ambición de los jefes tribuales africanos y su venta a los traficantes europeos de esclavos negros, en el que no se querido reconocer que este  escenario (o segmento de tiempo donde se dio una dinámica muy compleja) no ha permitido elevar (por encima de la miseria humana), el estigma de quienes contribuyeron a robustecer nuestra presencia como sujeto histórico y fortificar su presencia, dentro de un país en el que pareciera que ciertos grupos que se quieren auto reconocen como ascendientes de africanos se han dado a la tarea de olvidar ese proceso histórico y de cercenar el derecho a expresar libremente nuestros pensamientos, ideas y opiniones, por escrito o mediante cualquier forma de comunicación, sin ser censurado por ningún emporio humano que se siente distinto y menos por aquellos que utilizaron al Censo de Viviendas y Habita del 2011 de manera ventajista y mal intencionada para imponer tal postura y cuando éste no fue favorable para sus propósitos, empezaron a despotricar de él, sin importarles el sufrimiento y la perdida forzada de su sentido de pertinacia de quienes hoy con mucha sacrificio supieron entender su papel histórico, se convirtieron en sujetos creadores de cultura y por ello se dieron a la tarea de utilizar cualquier subterfugio en lo político para  buscan que se le reconociera una identidad que nada tiene que ver con la venezolanidad y para ello, han venido creando un ambiente engorroso producto de quienes utilizan al estado venezolano para obtener presencia política y eso es sumamente delicado, ya que sentimos que no se está actuando bien y que no se han dado cuenta que la Cultura Negra se convirtió en una referencia universal, en el que el fomento de las transpiraciones humanas se hace transparente y cada día gana más espacio en su consolidación (Véase que en el censo realizado en el 2011, solamente se reconocieron como afro descendientes el 0.7 de la población total, a pesar que ellos impusieron la pregunta que tienen que ver con el auto reconocimiento a través del Subcomité de Estadística de los Pueblo Afro descendientes, el cual eran controlado por las organización afros[2] y de la campaña comunicacional que tenían a través de los diferentes medios de comunicación, la cual era transparente y muy visible), en  vista que su transparencia ha traído como consecuencia que los sujetos de la acción que poseen una piel negra se alejen de esas posturas en el que está inmerso fraccionar el país (no sabemos conque intenciones), sin importarles que  el momento histórico que estamos viviendo se ha venido caracterizando porque se ha venido tomando en cuenta una serie de iniciativas proactivas que se han convertidos en opciones para redimensionar a este imaginario que se ha sedimentado y gestado en la conciencia colectiva de los diferentes emporios humanos que conformaron este país (Venezuela) y el mundo, transformándose en fuentes de referencias para formular criterios y líneas de acción, como cultura de signos y símbolos que han hecho un aporte importante a la humanidad y que han sentido, la indiferencia, marginalidad y discriminación de quienes no han podido superar las enfermedades drásticas que son propias del capitalismo (individualismo, egoísmo, etc.) y que han venido produciendo cambios profundo y peligrosos en la psiquis de quienes integran sus diferentes colectivos, ya que están alimentado el apetito depredador que lo han convertido en sectas que no los deja darse cuenta que vivimos en un mundo marcado instintivamente, en el que la característica más sobresaliente se hace visible por lo que está pasando a través de la imposición del desarrollo bélico de unos países contra otros, considerados subdesarrollados, como menos desarrollo militar y despliegue tecnológico .

Actitud que tiene una gran connotación para las poblaciones negras venezolanas que demuestra que el término afro descendiente[3] se presenta como una propuesta inconstitucional violenta que quebranta los principios y valores que se encuentran conformados en el espíritu de la Constitución Bolivariana de Venezuela que borra de un plumazo nuestra historia negra para imponer una que nada tiene que ver con la venezolanidad, porque no cuentan con unos cimientos que les sirvan de fundamentos sólidos y mucho menos…, una base social que la justifique (Nótese que en el Censo de Habita y Vivienda del2.011 los venezolanos de piel oscura se reconocieron como morenos mayoritariamente y negros, abarcando casi el 52 por ciento del total de la población venezolana), convirtiéndose en un acto difícil, antijurídico, anti histórico y de lesa patria, que estaría poniendo al país en una situación compleja, al no verse de manera objetiva y subjetiva sus consecuencias, al quererse eliminar un segmento importante para la reconstrucción de la historia y extrapolar del pasado, procesos que fueron importante para la construcción de la Patria Bolivariana, demostrándose que su inclusión en algunas leyes orgánicas pone en peligro el principio de concentración, oportunidad, respeto a la dignidad humana y jerarquía que tienen la Constitución Bolivariana de Venezuela (CRBV), como norma suprema y fundamento de nuestro ordenamiento jurídico, puesto que ninguna ley de menor rango puede estar por encima de ella, y sentimos que la Asamblea Nacional vulnera estos principios y este derecho, al introducir dicho término sin la consulta a los involucrados, echando por el suelo los resultados del Censo de Habita y Vivienda 2.011, llevado a cabo por el Instituto de Nacional de Estadística (INE), convirtiéndose en un acto donde sus consecuencias no se tomaron en cuenta, puesto que se contradice y pone en peligro, bienes jurídicos de gran relevancia que comprometen nuestra ciudadanía y nacionalidad, en el que no se percibió la consulta al sujeto de la acción que posee una melanina negra, las incidencias que lo llevaron a convertirse en sujeto creador de cultura, en el que no se comprendió que no es un producto que se originó de la casualidad, sino de una dinámica histórica que le permitió fortalecerse dentro de la estructura social venezolana y es extraño que la Asamblea Nacional, sea contraria hoy…, al pensamiento bolivariano, puesto que Simón Bolívar siendo un hombre de un pensamiento equilibrado y trascendental (Especialista en el área del Derecho. Título que logró en Perú y después fue otorgado post mortis en la Ciudad de Caracas), nunca hizo mención a dicho término, por el contrario en todos sus escritos, dejó expreso su preocupación, porque comprendió que ese ser humano  considerado como mercancía, había internalizado una nueva realidad, quedando inmovilizado, siendo su creatividad muy débil producto del impacto histórico que lo arropó y le cambió su personalidad), lo que conllevaría a que la historia se escribiera de manera diferentes y que su participación no se viera de manera tácita.

En este sentido, creemos que no debemos seguir poniendo el acento en lo individual, en el pensamiento parcelado, fosilizado, etc., en acentuar la segmentación, porque se estaría fraccionando el país, negándose la unidad y los principios fundamentales en que se sustenta nuestra CRBV y por otro lado…, la riqueza de su Diversidad, Pluralidad y Multiplicidad, por el contrario, se hace necesario internalizar la importancia que tiene el sujeto de transformación, y mucho más, cuando éste se convirtió en un aporte importante que vino a consolida la nueva estructura de los nuevos estados nación que se estaban creando, puesto que sin ello, era imposible crear la república, innovar políticas que saquen de la situación extrema a las familias negras, donde el abandono del padre es alarmante, y donde la violencia, maltrato físico contra la mujer, niñez y adolescencia, se han convertido en las características más resaltantes, transformándose en un estrato social que han sufrido con más rigor los efectos de la transculturización, disipándose la identidad, cosmovisión, valores y prácticas culturales (aunque quedan algunos vestigios, que aluden a sentimientos que son difíciles de conceptualizar) que en sus caras reflejan, el olvido y los cargadas que están de marcas, porque se perdió el aliento a la identidad, producto que han sido discriminados, vejados, excluidos y aprovechados por sus propia gente.

Creemos que se debe ampliar el panorama de las conjeturas para darle libertad al desenvolvimiento con propuestas productivas que le den a nuestra imaginación, el papel que le corresponde en la construcción de ese nuevo actor histórico o gestor de la acción histórica (En vista que la historia de este país, no se puede escribir sin tomar en cuenta el aporte de la cultura negra a la diversidad venezolana y sería absurdo, que tengamos que llamar a la Negra Matea, Afro-Matea o a José Leonardo Chirino, Afro descendiente Chirino), porque consideramos que este no es el momento para fragmentarnos, en vista que no hay tiempo para retroceder, pero sentimos y nos oponemos a que se borre de la historia nuestra participación, contribución y principalmente nuestra presencia de forjadores de una patria libre y soberana para darle vida a un actor foráneo que tiene sus incidencias en un continente diferente y que su referencia implica crueldad, la imposición de una conducta antihumana que violó todo precepto de humanidad o de derechos que tienen que ver con  seres humanos que no se les reconoció su capacidad para discernir, en el que se debe rechazar tal actitud y comprender que nuestra contribución histórica y cultural, no es hereditaria, ni genética (como erradamente se pretende imponer), sino que es el producto de las vivencias y prácticas que tuvieron quienes fueron calificados por las culturas africanas como negros en nuestro país (Venezuela), al lado de todos aquéllos que lucharon y terminaron por romper las cadenas coloniales que nos sujetaron durante siglos. Es por ello que sostenemos que esa conducta libertaria está muy lejos de venirles por parte de la africanidad, sino que se fraguó a través del proceso y las implicaciones  que se produjeron a través del desarraigo que después de pisar tierra americanas, convirtió a esos seres humanos en esclavos,  por el contrario el único ejemplo que dejaron, fue su entrega al sistema colonial impuesto (feudal con transito al Liberal Capitalista) y su voluntad consciente de participar en el nuevo modo de producción que se estaba gestando y por ello no les importó perseguir, apresar como bestias y vender a sus hermanos de sangre.

Por ello, llamamos a los venezolanos y principalmente a los sujetos creadores de la cultura negra venezolana, a no dejarse manipular con supuestos que han servido para consolidar una mentira consensuada, producto de una minoría que no quiere quieren reconocerse que son una minoría (los afro descendientes, solamente representan el 0.7 por ciento del total de la población venezolana) y que hoy no les importa seguir utilizando todo tipo de postura para opacar nuestra contribución )la de los negros, morenos y bachacos)en la conformación de la estructura venezolana para seguir afirmando un enfoque que intenta convertirse en una referencia histórica y cultural que tiene como objetivo negar la complejidad de nuestra diversidad cultural e histórica.

Por lo tanto, por más que lo quieran imponerlo…, Los venezolanos no aceptamos que nos llamen afrodescendientes, porque somos venezolanos, nacidos en la tierra de Bolívar y eso no le deben olvidar quienes en el país se han dado a la tarea de querer fraccionar la venezolanidad y por ello asumieron irse por el camino más corto y  convertirse en un partido político, demostrándose que les va hacer difícil que impongan ese etnónimo en Venezuela, porque los venezolanos no lo sienten como parte de su idiosincrasia y por ello…, han sentido su rechazo, debido a la fortaleza demostrada por los estratos negros, morenos y bachacos, que  han comprendido, que es un término racista, discriminatorio y xenofóbico que nació en el 2001 en Durban (Sudáfrica), con la intención de limpiar la conducta cruel e impía de los africanos, al cazar e intercambian por cualquiera banalidad a sus propios congéneres, sin ningún gesto de humanidad y de oscurecer la carga histórica que posee el termino negro y negra, como lo han hecho con nuestros epónimos negros y algunas fiestas tradicionales que responden al Calendario Católico (Por poner un ejemplo, Negra Matea, Negros José Leonardo Chirino, Negro Primero, Negro Juan Pirela, etc., y alguna manifestaciones como la de San Juan Bautista, Cruz de Mayo, Diablos de Yares, Parranda de San Pedro, San Benito de Palermo, etc.), en el que se ha querido cambiarle su toponimia y carga histórica para asumir la postura, que son fiestas afros venezolanas y donde se les impone el neologismo de afro, ante que el de venezolano.

PRENSA ALTERNATIVA, COMUNITARIA, POPULAR Y PEDAGÓGICA de San Agustín del Sur

[1] Tal procedimiento fue parte del estricto control del comercio y de la población ejercido por la administración colonial que servía para controlar las introducciones ilegales que no eran registrados y por los cuales no se pagaban impuestos, a los cuales se les consideraban negros de mala entrada que se hacían de los esclavos y servía para reconocer a los prófugos capturados, a los cuales se les  estereotipaban como cimarrones -marca de ganado bravío- o a fin de que fueran reconocidos por sus propietarios, (Tomado de E. Fernández, Las Encomiendas y esclavitud de los indios en Puerto Rico. 1508-1550.)

[2] “El Negro que ha vivido algún tiempo en Francia vuelve radicalmente transformado. Digamos en términos genéticos, que sui fenotipo sufre una mudanza definitiva absoluta”. Frantz Fanon. Piel Negra, Mascara Blanca. Editorial Abraxas. Buenos Aires. Pp. 16.

[3] Para Fanón “…explicar al hombre sin tener en cuenta esa posibilidad de asumir o negar una situación dada. El problema de la colonización comporta, pues, no solamente la intersección de condiciones objetivas e históricas, sino también la actitud del hombre para con esas condiciones”. Op. Cit. Pp 69.