El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo planteó este martes ante diplomáticos y actores públicos y privados en un acto en Palacio Nacional la necesidad de que los institutos de investigación, las universidades y las fundaciones dedicados al desarrollo intercambien saberes científico-tecnológicos.
El ingeniero Temístocles Montás considera que así no serían repetidos los modelos de desarrollo del siglo XX que han convertido a la región en simple exportadora de recursos naturales, en lugar de suplidora de bienes con valor agregado.
Este discurso de cierre del acto de puesta en circulación en el país del VII Informe de Cooperación Sur-Sur de Iberoamérica 2013-2014 fue leído en nombre del titular por el viceministro de Cooperación Internacional, Inocencio García, quien antes dio la bienvenida a los asistentes.
En el acto, en el Salón Verde del Palacio Nacional, el contenido del informe fue explicado por Mónica Páez, gerente de la Unidad Técnica del Programa Iberoamericano para el Fortalecimiento de la Cooperación Sur-Sur, informó la Unidad de Comunicaciones del MEPyD.
Estuvo acompañada de García y de América Bastidas, asesora en Asuntos Multilaterales del Ministerio, y de Aida Consuelo Hernández Bonelly, ex presidenta del Consejo de Alianza ONG.
En el auditorio estuvieron los embajadores de Colombia, Roberto García Márquez; de Ecuador, Carlos López Damm; la embajadora de Honduras, María Eugenia Barrios y los ministros consejeros de las embajadas de Venezuela, Francisco Javier Centeno, y Pablo Briones, de la legación de Argentina.
Además la cónsul de la embajada peruana, Eunice Bonelli Vásquez; Salvador Martínez, en representación de la legación mexicana; Kalla Marte, de la USAID; H. Modesto, de la Agencia Francesa de Desarrollo; Laura Abreu, del Banco Mundial, y Arlette Palacio, encargada de Cooperación del Ministerio de Relaciones Exteriores, acompañada de Manuel Gómez.
Montás valoró que para la región y para los países caribeños el informe es relevante porque sistematiza las experiencias de intercambio cooperativo de conocimientos, saberes y capacidades en un plano de respeto a la diversidad, a la unidad cultural, a la institucionalidad, a los fueros soberanos y, en el marco de un espíritu de solidaridad y hermandad.
“Ya esas características que están definiendo las prácticas de la cooperación sur-sur representan un inestimable recurso político y cultural para configurar un nuevo paradigma que coadyuve a un desarrollo más equitativo, respetuoso de las tradiciones culturales y del medio ambiente de los países de la región”, agregó.
El ministro fundamentó sus propuestas en el hecho de la transformación acelerada del mundo hoy ha derivado en economías ya globalizadas que tienen como eje central la gestión del conocimiento.
Recordó que pese a que Iberoamérica es una de las regiones del mundo que acumula una variada riqueza en recursos naturales, culturales, científicos, tecnológicos y demográficos, con 19 millones 933 mil 668 kilómetros de extensión superficial y 584 millones 890 mil 993 habitantes, afronta el desafío de insertarse de manera competitiva en la economía globalizada.
Agregó que esta tiene la disponibilidad de más de cien años en hidrocarburos, millones de kilómetros de bosques, dos océanos y acumula más del 27% de agua dulce del mundo.
Empero dijo que como establece la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), Iberoamérica tiene entre sus más urgentes desafíos el alcanzar un desarrollo productivo de mayor valor agregado y una mayor equidad distributiva y elevar la cohesión social y la inclusión ciudadana.
Recordó que además se sugiere un número más amplio de profesionales altamente capacitados, científicos y tecnólogos en condiciones de crear nuevos conocimientos a través de la inversión al desarrollo y de obtenerlo de fuentes externas.
“En ambos casos, se trata de apropiarlo, adaptarlo y transferirlo a los actores de las ramas productivas y sociales”, dijo el ministro.
Ante tales retos dijo que el papel que puede jugar la cooperación sur-sur es impulsar estrategias que unidas a las antes citadas sean eficaces, tales como el intercambio de saberes entre nuestros pueblos; y el fomento del intercambio de buenas prácticas de los sistemas educativos de la región.
Mientras que al inicio del acto el viceministro García recordó la firma del protocolo para la definición de su política internacional de cooperación y la oferta del nuevo modelo penitenciario mediante acuerdo con la Procuraduría General de la República.
Entre tanto, Páez observó al presentar el informe, que es un ejercicio intergubernamental, que la cooperación aún no ha podido sistematizarse como sugirieron los jefes de Estado y de gobierno reunidos en la cumbre de 2007.
En el informe se destacan entre los principales cooperantes de la República Dominicana en esta modalidad a Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Colombia y Venezuela.
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