SANTIAGO.- Un vigilante privado, de servicio en una sucursal del Banco de Reservas en esta ciudad, dispuso esta mañana de su vida, al hacerse un disparo a la cabeza.
Víctor Manuel Pinales, de 22 años, quien residía en el barrio Pekín, de la zona sur de aquí, falleció de manera inmediata dentro de la caseta de la planta de la empresa bancaria, localizada en el sector Los Álamos, a la entrada de la ciudad.
De acuerdo a datos ofrecidos por José Ramírez, compañero de trabajo de Pinales, este llegó a eso de las 7:00 de esta mañana al trabajo y, tras saludarlo, ingresó a dicha caseta, donde habitualmente los guardianes cambian de ropa para ponerse los uniformes.
Dijo que minutos después que Pinales entrara a la caseta se escuchó un disparo y que, cuando fue a averiguar el origen de la detonación, encontró a su compañero muerto en el suelo.
Tanto Pinales como Ramírez pertenecen a la empresa de vigilantes privados Senase. Las autoridades judiciales, policiales y de esa empresa bancaria iniciaron de inmediato las averiguaciones, para determinar todo lo relacionado al suicidio.