La población de pescadores del país se estima en unos 11,500, de los cuales unos 8,500 son del área costera marina y los restantes se dedican a la pesca en aguas interiores (ríos, presas y lagos), según estadísticas del Consejo Dominicano de Pesca y Acuicultura
(CODOPESCA).
En la actualidad hay una flota pesquera de alrededor de 4,800 embarcaciones, esencialmente de pequeña escaña. El 25% del esfuerzo pesquero está en Samaná, unas 920 embarcaciones, le sigue Sabana de la Mar, con 225 embarcaciones, pero en la provincia de El Seibo hay unas 500 embarcaciones, que incluyen las de Miches y La Gina.
CODOPESCA, cuyo director ejecutivo es el vicealmirante retirado Francisco Frías Olivencia, informó que los pescadores renovan
sus licencias cada 2 años, un requisito para el desarrollo de sus actividades. Expresó que unos 3,500 pescadores renovan sus licencias con regularidad.
La Ley obliga a las personas a sacar sus licencias, tanto para la pesca comercial como para la deportiva, pero por falta de la logística necesaria, eso no se cumple a cavalidad. No obstante, a través de la Marina de Guerra, que es la institución
que le da el permiso de salida a las embarcaciones, se las retiene si no tienen al día su documentación, incluyendo la licencia.
La pesca local se mantiene relativamente estable, aunque en algunos sitios hay evidencias de sobre pesca, pero en el país nunca ha habido una pesca rica debido a que la costa es muy estrecha, como por ejemplo la Atlántica (de Montecristi hasta Cabo Engaño) a excepción de la costa de Samaná que tiene una mayor profundidad, explicó Raúl González Pantaleón, encargado de Regulación Pesquera de CODOPESCA.
Sin embargo, agregó que en el Atlántico hay una pesca de futuro, pero los pescadores hacen cierta resistencia a irse a aguas profundas. Esa es una pesca de temporada, pero es buena. Precisó que CODOPESCA no ha podido cambiar esa forma de pensar de los pescadores.
González Pantaleón señaló que el cultivo de peces (acuacultura) a pequeña escala ha ido creciendo, pero los grandes proyectos se han quedado un poco rezagados. Se observa un crecimiento en el cultivo en jaulas en los embalses, pero todavía estamos en pañales y nos falta mucho camino por recorrer, pero hay indicadores de la acupuntura a nivel comunitario de que está teniendo avances.
Explicó que el país sólo produce el 30% del consumo nacional de pescado, que se estima en un promedio anual de 54 toneladas
métricas, equivalentes a unos 54 millones de kilos de productos pesqueros.
Hay un componente importante que se reporta ahí, en los enlatados y los secos salados, dijo el funcionario.
Indicó que el consumo se calcula, sin la población turística, en 3.8 kilos por persona y con el turismo 4.5 kilos por persona. Pero
realmente el consumo está por debajo de eso debido al alto componente de los enlatados que se reporta ahí (sardinas, arenque, que se reexportan a Haití).
Expresó que en 2013 el país importó productos pesqueros por más de US$100 millones. Agregó que el país exporta peces marinos (langostas, anguilas y peces en menor cantidad).
