SANTIAGO.- El Gran Teatro del Cibao celebró anoche su décimo noveno aniversario, con un espectáculo en el que dominicanos no videntes, sordos, con síndrome de Down, autistas y con discapacidad físico motora fueron los protagonistas, quienes demostraron que sí se puede, a pesar de vivir con esas dificultades.
Todo esto ocurrió ante una audiencia que llenó todas las localidades de la “Sala de la Restauración” del principal templo del arte y la cultura de la región cibaeña, encabezada por el ministro de Cultura, José Antonio Rodríguez; la directora general del teatro, Brenda Sánchez y el maestro Jochy Sánchez, director regional de Cultura, quienes pronunciaron breves palabras al inicio de la ceremonia.
Se trató de un escenario para que los asistentes disfrutaran del talento especial, con la dirección general de María Ortiz, en el marco musical de la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil, dirigida por Darwin Aquino.
La dirección del Gran Teatro del Cibao aprovechó la celebración para reconocer los aportes hechos en beneficio de la institución por los conocidos locutores Ramón de Luna y su esposa Minucha de Luna, así por el Ballet Folklórico del Centro de la Cultura de Santiago.
El vocalista Pavel Núñez y el merenguero típico Krancy García (El Prodigio) tuvieron sendas actuaciones especiales con los no videntes Janette Marquez Valerio y Guillermo Alejandro.
El mayor disfrute de los asistentes se produjo cuando decenas de jóvenes con síndrome de Down salieron al escenario, tanto a bailar bachata como una danza.
También, personas afectadas por diferentes síndromes y no videntes tocaron instrumentos de percusión, en tanto que el ballet folklórico que deleitó con sus bailes estuvo compuesto por varios sordos, un invidente y cuatro con síndrome de Down.
El show inició con el tema “Caña Brava” en instrumental, siguiendo “Quisqueya”, “Merenguero Hasta la Tambora”, “Color Esperanza”, un popurrí de merengues tradicionales, “Bachata en Fukuoka”, “Angel para una Tambora”, “Funiculí Funiculá”, “Bachata Rosa”, “Leña”, “Santiago” y “Oda a la Alegría”.
El Teatro Orquestal Dominicano (TODO) es un programa que se inscribe en el marco de las políticas de integración social que, a través del arte, pretenden encaminar el Ministerio de Cultura y dirigida a personas con discapacidades.
Compuesto por 129 personas, promueve brindar igualdad de oportunidades a dichas personas, capacitarlas y formarlas para, eventualmente, insertarlas en la institución artística a que corresponda del referido Ministerio.