Como es bien sabido ya no es un secreto para nadie que uno de los crímenes de los tiempos modernos que goza de mucha popularidad es el robo de identidad y que en mucha ocasiones va de la mano de otro que es muy preferido por los amantes de lo ajeno llamado los delitos o crímenes informáticos, y que en asuntos legales son ahora conocidos como “Delito de Alta Tecnología”.
Por: Jacinto C. Ozoria
Es con gran asombro ver en el día a día a muchos de mis conciudadanos dar sus números de cédula como si se tratara de un “buenos días” a cualquiera que se la pida. Digo yo que a lo mejor es por simple ignorancia o porque piensan que con sus números de cédulas no podrían hacer cualquier triquiñuela que le podría sumar a su vida un fuerte dolor de cabeza hasta tanto se investigue y se solucione cualquier crimen cometido usando sino su documento más importante uno de ellos.
Oigo con mucha frecuencia cuando algunos ciudadanos llaman a programas de radio o televisión y le dicen por ejemplo: “Enriqueto usted es la llamada ganadora y por lo tanto se acaba de ganar una caja de compra que contiene: diez libras de arroz, dos arenques, una libra de ajo y cebolla, una lata de salsa entre otros condimentos, díganos su nombre completo y su número de cédula”. Entiendo su alegría, pero señor Enriqueto espere un momento, antes de decir su nombre completo y comenzar a cantar su número de cédula como si fuera cantando la lotería, asegúrese de que por lo menos está fuera del aire.
También cuando mande a Ramoncito a la pulpería a buscarle “fiao” un pote de romo, y él regrese sin el “preciado líquido” diciéndole que dice el vecino que mande su cédula, usted sabrá si se la manda para que él la anote en la pared o en el tan odiado cuaderno de los que tienen poca memoria o sea los “mala paga”.
En los Estados Unidos existe un documento oficial que contiene el número de seguro social, y que sin temor a equivocarme y basándome en para que fines se usa tal documento me atrevo a compararlo con ese documento oficial dominicano. Digamos que si en el alto Manhattan se le acerca un ciudadano en la calle y le dice: como parte de nuestra propaganda estamos regalando esta camiseta, lo único que tienes que hacer es poner su número de seguro social y completar este formulario, yo “doy pesos a moriquetas” que ese individuo no tendrá mucho éxito colectando tal información y eso es debido a que ya muchos ciudadanos están “moscas” con relación a quienes proveen ese número.
Es muy cierto que a la velocidad que avanza la humanidad cada día estamos siendo más vulnerables a ser víctima del robo de identidad, pero es también cierto que nosotros deberíamos de tomar las medidas de lugar para protegernos o al menos hacérselo más difícil a los amantes de lo ajeno. Así que cuando lo paren en la calle y le digan por ejemplo: denos una copia de su cédula para empadronarlo en el partido “que resolverá todos los problemas que enfrentan los dominicanos” dígale ¡mi cédula no! y hágalo a través de un método más confiable y más seguro.
Entiendo que eso de dar su número o copia de cédula es algo tal vez asunto de cultura, pero hay que tener en cuenta que los avances tecnológicos que la sociedad posee hoy día no son los que existían tiempos atrás. Sólo piense lo fácil que puede ser en estos tiempos modernos el clonar un documento. Así que la próxima vez que un “tributario” le diga: consíganos una copia de su cédula que le vamos a conseguir el cargo de “ayudante civil del presidente” por decir cualquier pendejá, dígale ¡mi cédula no!