La Luna se formó luego que un meteoro impactara contra la Tierra hace cuatro mil 500 millones de años.
La investigación del Instituto de Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre de la NASA (SETI) reveló que la superficie de la roca que se estrelló en la ciudad de Novato, norte de California, era de color negro.
Los expertos achacan ese hecho a los impactos que habría sufrido el meteorito entre 64 y 126 millones de años después de la formación del Sistema Solar.
El líder del estudio, Peter Jenniskens, indicó que se ha revelado una larga historia que se remonta a cuando la Luna se formó a partir de la Tierra, después de un impacto gigante.
Ahora existe la sospecha de que el impacto que formó a nuestro satélite natural pudo haber esparcido los restos por todo el sistema solar interior y golpear el cuerpo progenitor del meteorito de Novato, añadió Jenniskens.
El equipo científico también determinó que el cuerpo principal del meteorito se rompió de nuevo en otra colisión hace unos 470 millones de años y desató una cadena de escombros en el cinturón principal de asteroides entre Marte y Júpiter.