"¿Ustedes quieren que les ayudemos? Presenten su proyecto", les dijo el presidente a los productores de vegetales de Loma de Cabrera. Y eso hicieron con invernaderos en 45 tareas, para producir ajíes habaneros, de los más picantes del mundo.
Luego de la visita sorpresa del presidente Danilo Medina el 21 de abril del año pasado, de analizar la factibilidad de la producción en ambiente controlado y de comprobar la seriedad de la directiva y de los miembros de la Asociación de Productores de Vegetales "José Cabrera", el gobierno dominicano aprobó un financiamiento de 23.9 millones de pesos a una tasa de interés del 5% anual para construir los invernaderos y otras necesidades.
Juannis Gómez, una de las productoras, todavía no lo cree, que siendo ellos unos desconocidos habitantes de la lejana Loma de Cabrera, se acordaran de ellos, les prestaran atención y mucho más que les aprobaran ese préstamo confiando únicamente en su palabra. Todavía no sale de su asombro y lo dice. Lo cuenta.
Pero sucede (siempre hay un pero), sembrar estos ajíes es cosa que se rige por un calendario. No puede usted coger y ponerse a sembrar porque quiera hacerlo ahora y en este momento. Tienen su temporada para sembrar y cosechar.
El asunto es que las instalaciones y el financiamiento estuvieron listos en el tiempo previsto, pero no se podía todavía sembrar los picantísimos ajíes, por lo que decidieron como alternativa sembrar unas dulcísimas sandías.
No había de otra, cuentan, porque sentarse a esperar no podían, ni debían, con la necesidad de ingresos que tenían.
Cuando fuimos a verlos estaban en plena cosecha. Las sandías, preciosas. Las venden a los hoteles de Bávaro y de Puerto Plata. En seis naves, la cosecha anduvo por los 900 mil pesos.
Marino Rodríguez, otro de los productores, nos habló de la dinamización de la economía local, de la creación de 175 empleos, entre ellos de jóvenes (su primer empleo).
El proyecto ha sido un escándalo, a tal punto que lo llaman la "Niña Bonita" de la provincia Dajabón.
Hoy con sandías, pronto con ajíes habaneros, cambia la vida de los agricultores de Loma de Cabrera.