Con reveladoras historias de su vida personal y profesional, la artista presentó su concierto “Confesiones”, con el que celebró sus 32 años de carrera artística.
En medio de varios segmentos dramatizados, la cantante francomacorisana mostró al público como se dieron sus inicios en el arte y confesó desde sus más gratas experiencias hasta la mayor de sus frustraciones.
La solista manifestó sentirse desdichada en el amor y confesó que canciones como: “Demuéstramelo”, “Espéralo” y “Ni en sueños”, fueron hechas por encargo, en momentos en los que sufría decepciones amorosas.
Contó además que tenía una gran obsesión por ser valorada y reconocida, la cual logró superar ahora que Dios ocupa el primer lugar en su vida.
“Ahora me siento afortunada, gozo de muchos gustos y privilegios; el amor de mi familia, mis amigos y un público que me sigue con fidelidad” expresó.
El público que desde tempranas horas acudió al salón La Fiesta del Hotel Barceló, disfrutó de una noche cargada de emocionantes sorpresas, una de ellas fue la participación en escena del salsero Alex Matos con quien en tiempo de baladas interpretó a dúo el tema “Si entendieras” composición de Anthony Ríos.
El momento más ovacionado en toda la noche fue cuando Estévez invitó a su hijo Juan Carlos a tocar la batería en una de sus canciones, este con apenas 12 años demostró poseer una seguridad y un talento impresionante. Posteriormente Jackeline cantó junto a su hermana Sanya la canción “Amiga Mía” popularizada por el cantautor español Alejandro Sanz.
Otra de sus invitadas de la noche fue la salsera Flor Marie con quien interpretó la canción “Las 40” el merengue también tuvo lugar en la mágica noche con la participación del Jefrey en la canción “Me muero por ti”.
La dirección musical estuvo a cargo de su compueblano Henry Hierro a quien llamó su productor musical de toda la vida, también de su pueblo estuvo tocando la Sampoña, Julián Pichardo también compositor de las canciones “Construyendo en sueños” y “Veo la lluvia caer”.