El Tribunal de la Segunda Sala de Audiencias de la Corte de Apelación del Distrito Nacional fijó para las 9:00 de la mañana del 19 de noviembre el conocimiento del recurso de apelación interpuesto a favor del dirigente estudiantil Héctor Eduardo Pichardo Hernández, condenado por la muerte del coronel Julián Suárez Cordero, ocurrida el 23 de abril de 2013 en las inmediaciones de la UASD.
Pichardo Hernández, estudiante de Ingeniería Civil en la UASD y miembro del grupo estudiantil FELABEL, fue acusado por la Policía Nacional, junto a los también dirigentes estudiantiles Wilson Dalcier Javier, Víctor Alfonso González y Diógenes Isidro Gutiérrez, y al comerciante Eddy Giovanny Bonilla, de asociación de malhechores para actuar en el caso del coronel Suárez Cordero.
El tribunal que integran los jueces Ramona Natividad de los Santos, Rafael Pacheco y Arlín Ventura, rechazó la acusación de “asociación de malhechores”, descartando el 95 por ciento de las pruebas presentadas por el Ministerio Público, absorbiendo de toda responsabilidad civil y penal a cuatro de los implicados, mientras que Pichardo Hernández fue condenado a 10 años de reclusión.
La sentencia contra el dirigente del FELABEL fue validada por dos de los jueces, pero la misma quedó cuestionada con el voto disidente de la magistrada Arlin Ventura Jiménez, quien consideró que debió darse una sentencia absolutoria a favor de Héctor Eduardo Pichardo.
Al motivar su voto disidente, la juzgadora expresó que “me afloran grandes dudas sobre el señalamiento que se hace contra el imputado Héctor Eduardo Pichardo, que impiden dictar una sentencia condenatoria”, estimando insuficiente la testimonial de José Alberto Benzant Belliard.
Benzant Belliard dijo haber identificado a Pichardo Hernández “porque acostumbraba a llevar un bulto color verde”, similar al que usaba uno de los encapuchados que vio actuar en la escena del crimen, sin aportar ninguna otra evidencia que corroborara su declaración, como haberlo visto cuando se ponía la capucha o que lo escuchó hablar mientras tenía su rostro cubierto.
“El testimonio de José Alberto Benzant Belliard, prueba única directa y valorable que podía servir para otorgarle vida a las demás pruebas aportadas, ya que todas las anteriores son solo pruebas de naturaleza certificante, referencial e instrumental que por si solas no vinculan al imputado a los hechos de la acusación”, explicó en la audiencia la jueza disidente Arlin Ventura, previo al dictamen del tribunal.
El Dr. Tomás Castro, abogado de la defensa técnica de Héctor Eduardo, al interponer el recurso de apelación sostuvo que a su defendido se le violaron derechos fundamentales y procesales, como el de presunción de inocencia, el debido proceso y el derecho de defensa, y pide que la sentencia sea revocada, por ser violatorio de normas legales y constitucionales.
En la oferta probatoria para sustentar la apelación a favor de Pichardo Hernández, el Dr. Castro depositó un CD, donde aparece un individuo disparándole a la Policía, en el que según el abogado se puede identificar a José Alberto Benzant, “testigo estrella: de la Fiscalía; el testimonio de la señora Pamela Gerónimo Ercia, que dice fue obviado por el tribunal que conoció el caso; y el voto disidente de la Magistrada Arlin B. Ventura Jiménez.
De su parte, la representación legal de la familia del coronel Suárez Cordero, como la Fiscalía del Distrito Nacional, que preside Yeni Berenice Reinoso, consideraron “débil e inaceptable” la sentencia dictada el pasado 11 de julio por el Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, que reconoce la inocencia cuatro de los imputados y condena a Pichardo Hernández a 10 años de prisión en el caso del oficial policial, por lo que también recurrieron el dictamen por ante la Corte de Apelación del Distrito Nacional.