Por: Nélsido Herasme
Entre los cambios que se han producido en el sistema de salud del país, nosotros, de manera personal, felicitamos la designación del doctor José Manuel Puello, ahora como encargado del Vice Ministerio de Salud Colectiva, del Ministerio de Salud Pública.
Soy de los que entienden que los cambios de titulares en la administración pública, en el mayor de los casos, no logran resolver los problemas, dado que muchos de ellos son ancestrales, pero si permite la distensión, es decir aflojamiento, soltura y el designado se le presenta la oportunidad de demostrar calidad en su nueva misión.
En el caso que nos ocupa, sabemos que la selección de José Manuel Puello Montero es el premio a una carrera impregnada de esfuerzos, dedicación y sacrificios por su país, por lo tanto, sabemos que este nuevo reto le sumará éxitos a su carrera, la cual asumirá con la misma responsabilidad que siempre le ha caracterizado.
José Manuel es un excelente profesional de la medicina, conocedor de los diferentes tipos de infecciones tropicales, quien hace poco se desempeñó como director del Centro Nacional de Enfermedades Tropicales, (CENCET), lo que antes se conoció como “Malariología”, cuya labor le permitió el reconocimientos del Ministerio de Salud Pública y las representaciones locales de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), en cuyo marco presentó avances y retos del Programa Nacional Contra la Malaria en la República, en el cual se pudo observar cómo las cifras de malaria han ido disminuyendo en el país en los últimos 15 años, a través del trabajo de un equipo de profesionales, técnicos y de administrativos que tiene el CENCET en todas las provincias y municipios del país.
Nosotros que en varias ocasiones participamos junto al doctor Puello en charlas, conferencias, talleres, seminarios y operativos preventivos, pudimos darnos cuenta del compromiso y la gran capacidad en el conocimiento y manejo de las infecciones tropicales.
Es verdad que perdimos a un conspicuo comunitario, cuyo esfuerzo se inscribe en la lucha por erradicar la malaria y enfermedades como el dengue, la leptospirosis y la chicungunya, pero nos ganamos a un fiel trabajador y vigilante de la salud de todos y todas.