Los Cementerios de la ciudad de Santo Domingo constituyen una vergüenza y una burla de la Alcaldía encabezada por Roberto Salcedo a los ciudadanos del Distrito Nacional, por el estado de abandono en que se encuentran, predominando en ellos la maleza y escombro que cubren sus calles y paseos internos, la inexistencia de personal de seguridad y la operación de una mafia institucionalizada, compuesta por miembros de los grupos de presión organizados y apoyados por las autoridades municipales, que obligan a los ciudadanos que tiene sus deudos en esas instalaciones a utilizarlos para la limpieza y mantenimiento de las tumbas, según consideración del Bloque de Regidores del P.R.M.
El Regidor Waldys Taveras, Vocero del Bloque de Regidores del Partido Revolucionario Moderno (P.R.M), en comunicación dirigida al Alcalde del Distrito Nacional, demanda redefinir las prioridades del gasto municipal, a los fines de que los insuficientes recursos presupuestario del Ayuntamiento del Distrito Nacional sean invertidos en la prestación de los servicios municipales primarios y exclusivos que bajo la responsabilidad de los gobiernos locales establece la ley 176/07, entre los que se encuentra el mantenimiento y administración de los cementerios.
El Vocero del P.R.M., señala en su comunicación que el Ayuntamiento del Distrito Nacional tiene 19.9 millones de pesos presupuestados para el mantenimiento de los tres cementerios del Distrito Nacional, para el año 2014, que si bien son insuficientes no obstante se pueden bien invertir para la prestación de un mejor servicio, con la adquisición de equipos y el mantenimiento de brigadas permanentes de limpieza de las áreas comunes de los cementerios, así como la asignación permanente de policías municipales, para hacer más eficientes y digno el mantenimiento y administración de los cementerios municipales, servicio que va dirigido especialmente a familiares de finados pobres y de clase media que son los que usan esas instalaciones, ya que los ricos utilizan los cementerios privados.
El Regidor Waldys Taveras, advierte que la no prestación de los servicios públicos por parte de las autoridades municipales, puede conllevar faltas graves que podrán obligar a reparar por daños y perjuicios a los ciudadanos que se sientan y prueben que han sido afectados por la no prestación de los servicios, como dispone tanto nuestra constitución como la Ley Orgánica del Distrito Nacional y los Municipios.