El vicepresidente ejecutivo de la Asociación Dominicana de Industrias Eléctricas (ADIE), ingeniero Milton Morrison, advirtió que el principal problema que tiene el sector eléctrico dominicano es la distribución, donde el 33% de la energía se pierde, lo cual equivale a unos RD$24,000 millones al año.
Entrevistado por el periodista Federico Méndez, en el programa Esferas de Poder, que se transmite los domingos de 5:00 a 6:00 de la tarde, por Santo Domingo TV, manifestó que se debe buscar una solución para el gran problema que tiene el sector eléctrico en la distribución.
Consideró que el gobierno y todos los sectores involucrados deben tener la voluntad para solucionar esa situación.
Expuso que la pérdida de electricidad se debe a que las empresas distribuidoras no tienen forma de cómo cobrar la energía que se sirve.
“Cuando hablamos de un 33%, si ese porcentaje lo llevamos a una cuantificación económica, estamos hablando de más de US$500 millones, estamos hablando en términos de pesos que esas pérdidas representan cerca de RD$24,000 millones al año”, significó.
Morrison manifestó que también existe una realidad que hay que enfrentar y es cómo se hará frente a los elementos regulatorios ilegales que deben regir al sector, y que desde que ese emitió la Ley General de Electricidad no se han cumplido.
Advirtió que un sector eléctrico que no está en la legalidad, no puede funcionar de una manera sostenible y coherente.
“Entonces, hay que ver cómo llevamos el sector eléctrico a la legalidad, al cumplimiento del marco legal y regulatorio, el cumplimiento de las leyes que tanto el sector público como el privado y todos los agentes puedan participar”, adujo.
Morrison saludó la convocatoria del pacto eléctrico, hecha por el presidente Danilo Medina, recordando que el mismo está contemplado en la Ley de Estrategia Nacional de Desarrollo.
Citó que entre las discusiones que deben ser tocadas sin prejuicios están la generación y la transmisión de electricidad y ver cómo se puede fortalecer el área, que define como fundamental para la operación del sistema.
“Qué vamos a hacer, qué tenemos para el presente, qué es lo más conveniente para el país hacia el futuro, yo creo que esa es una discusión sumamente importante”, argumentó.
Consideró que había un retraso de un año y ocho meses del mandato contemplado en esa normativa, por lo que deben ser tocados los temas importantes.
“Obviamente, estamos en un momento interesante, nunca es tarde para abordar este problema, que lo tenemos desde hace varias décadas, el pacto eléctrico como ese escenario en el cual de una manera sensata y objetiva reales soluciones de un problema que nos afecta a todos”, subrayó.
Planteó que el problema también lacera las finanzas públicas y el buen desenvolvimiento del aparato productivo nacional y la vida cotidiana de la población.
Entiende que el sector eléctrico lo que necesita es muchos recursos para poder llevar a cabo los proyectos que son necesarios para buscar una solución.
El subsidio eléctrico
El vicepresidente ejecutivo de la ADIE consideró que no es justo que quienes tienen recursos para poder pagar el servicio eléctrico a los costos reales estén subsidiados por el Gobierno.
Morrison observó que en el país hay un subsidio generalizado en el suministro de energía eléctrica, que conlleva una inversión superior a los US$1,300 millones anuales, por lo que en la discusión del pacto eléctrico debe discutirse su eliminación.
“El subsidio debe ser focalizado para el que realmente necesita el subsidio, pero independientemente de que usted sea multimillonario o usted sea pobre, al final de cuenta el Estado dominicano le subsidia la tarifa, entonces ahí hay un problema”, argumentó.
Afirmó que cuando se suma esto a las inversiones en el bono luz o los recursos que se deben invertir para que las Edes puedan mantener sus operaciones adecuadas, es lo que significa más de US$1,300 millones anuales, que corresponde al subsidio eléctrico.
La deuda eléctrica
Morrison manifestó que la deuda del Gobierno con el sector eléctrico alcanza una suma superior a los US$900 millones.
Citó deuda con empresas como Ege-Haina y AES Dominicana, que tienen facturas pendientes de pago por alrededor de cinco y seis meses, en algunos casos.
Comentó que cuando una empresa generadora sale de servicio, puede ser por múltiples razones, como mantenimiento, avería, falla, y también en ocasiones que se quedan sin combustibles y no tienen recursos para comprarlo “porque el Gobierno le adeuda y no le paga”.
“Siempre ha existido una confusión, puedo yo llamarle así, con el tema de los apagones, del origen de los apagones que tenemos a diario y del origen de los apagones que de manera coyuntural pueden aparecer en un momento, en el cual la deuda que se genera entre las empresas distribuidoras y los generadores llega a unos límites muy altos”, explicó.
En ese tenor, dijo que ahí se aduce que hay apagones financieros, pero entiende que el concepto aplica en el día a día.
Sostuvo que los apagones que se producen responden a una lógica que las empresas distribuidores, en sus informes y reportes le llaman “gestión de la demanda”.
Indicó que esto significa que diariamente las distribuidoras de electricidad establecen que suplirán una determinada cantidad de energía, porque existe un número de circuitos, que cuando se calcula el porcentaje de cobro y el pago recibido no alcanzan el 100%.
“Entonces, en esa misma medida ellos dicen: yo no puedo darle 100% de energía, o sea, 24 horas a alguien o a sectores que me están pagando el 60% de lo que yo le doy”, apuntó.