El economista Arturo Martínez Moya considera que aun respondiendo a una situación económica particular de Venezuela, la venta de la deuda de República Dominicana a la empresa al banco estadounidense Golman Sachs podría afectar la imagen del país en los mercados de capitales.
Martínez Moya consideró que el gobierno de Venezuela debió comunicar a República Dominicana la operación de venta de la deuda por concepto del programa PetroCaribe que bien pudo ser adquirida por el gobieno dominicano.
Martínez Moya dijo que al ser la operación tan ventajosa para el banco adquiriente, en la perceción de los mercados de capitales se puede entender que se hizo así por un problema de República Dominicana y no de Venezuela.
Por suerte, dijo, que la situación de la economía dominicana es buena, mantiene el pago de su deuda al día y eso se sabe en esos circulos, pero alertó que la percepción en esos mercados no la controla el país.
Dijo que un tenedor de bonos dominicanos podría ahora pensar lo que quiera sobre la operación indicada.
La transacción, de acuerdo a los informes, involucra una ganancia de 59 por ciento para Goldman Sachs, ascendente a $2,360 millones, a cambio del pago de $1,750 millones que otorgaría a Venezuela por las obligaciones que en agosto de este año sumaban cerca de $4,090 millones.
Durante la existencia de Petrocaribe, creado en el 2015, la República Dominicana ha recibido un suministro de crudo venezolano por un valor de $8,224 millones.