Santo Domingo, República Dominicana.-La Comisión Económica del Partido Revolucionario Moderno, PRM, reclamó de las autoridades del gobierno actuar con rapidez y transparencia en el caso de la quiebra del Banco Peravia de Ahorros y Créditos, S.A., caso que tiene todas características de un fraude, es el resultado del incumplimiento de normas legales vigentes, así como de una débil y permisiva supervisión de la Superintendencia de Bancos.
El doctor Arturo Martínez Moya, presidente del organismo perremeista, hablando en rueda de prensa celebrada este miércoles, en el Instituto doctor José Francisco Peña Gómez, afirmó que esa entidad gubernamental no actuó a tiempo y permitió el ocultamiento de operaciones indebidas, que beneficiaban a los principales ejecutivos que hoy están de fuga. Este fraude, sin duda, se gestó durante un prolongado periodo, a la vista de autoridades que tenían el deber de evitarlo.
Dijo que al contribuyente dominicano hay que darle explicación de este caso, sin más dilación. La Superintendencia de Bancos debe decir cómo era que operaba la contabilidad paralela, las maniobras contables que hacían para ocultar las operaciones indebidas, así como determinar el monto a que ascendió el fraude. También debe informar sobre la cuantía de los activos en la contabilidad oficial y en la contabilidad paralela, porque la diferencia es el tamaño de la pérdida y del fraude que se cometió.
En la rueda de prensa estuvieron presentes además, los precandidatos presidenciales Luis Abinader, y Geanilda Vásquez, Jesús Vásquez, Secretario General del PRM, Cesar Cedeño, Coordinador del equipo político del Presidente Hipólito Mejía, Eduardo Tejera, vicepresidente de la Comisión, Fernando Duran, Héctor Guzmán, Rafael Montilla, Salvador Rosa, Félix Santana, Agapito Reyes, Eugenio Martin Taveras, entre otros.
Martínez Moya dijo que la transparencia con que se deben manejar las autoridades monetarias exige que se le diga al país los nombres de los responsables, tanto los del Banco Peravia como los del sector oficial, y sin dilación proceder a la denuncia penal correspondiente.
“La Superintendencia de Bancos está en el deber de informar al contribuyente las razones por las que no exigió que se aporten las provisiones y capitalizaciones que correspondían. Si se hizo y no hubo respuesta, entonces debe explicar por qué no se pasó a la fusión con otra entidad bancaria y/o venta de acciones a terceros, hasta llegar a su liquidación. Todo lo cual debe hacerse sin trauma para los ahorristas”. Enfatizó
lManifestó que la explicación es necesaria porque era de público conocimiento que el Banco Peravia estaba descapitalizado, y que en más de una ocasión la Superintendencia de Bancos pospuso su liquidación, perdiéndose la oportunidad de someter a la justicia a los responsables, recuperar el dinero distraído y evitar la fuga de los responsables del fraude.
Consideró que el ahorrista-depositante confió en que todo estaba normal en el Banco Peravia, tal y como lo dijo la Superintendencia de Bancos, no obstante saberse que tenía problemas de iliquidez y que era insolvente. Se sabía que para captar depósitos en dólares y pesos, el Banco se comprometía a pagar intereses que excedían la tasa de mercado.
“También se sabía que el Banco no estaba pagando los intereses a tiempo, que no devolvía inversiones ni depósitos a vencimiento, principalmente cuando el monto era importante. Y como si fuera poco, se sabía, porque era público, que se acumulaban denuncias por estafa contra el Presidente y Vicepresidente de la entidad bancaria quienes, no obstante la situación del Banco, vivían una vida de lujo”, argumentó
Enfatizó que el PRM y sus dirigentes actúan con responsabilidad con los asuntos del sector financiero, a diferencia del PLD y Leonel Fernández. El pueblo dominicano sabe que la quiebra bancaria del 2003 se incubó durante el periodo de Gobierno de Leonel Fernández 1996-2000. Leonel y su gente actuaron irresponsablemente, dedicándose a hacer publicidad mentirosa y engañosa con los casos BANINTER, Bancredito y Banco Fiduciario.
Por tales razones, dijo, “el PRM y sus dirigentes exigen a las autoridades monetarias y al gobierno de Danilo Medina que en el caso del Banco Peravia actúen con rapidez y establezcan responsabilidades civiles y penales”.
Recalcó que la quiebra fraudulenta del Banco Peravia nunca debió ocurrir. Para evitar situaciones como esa fue que el gobierno de Hipólito Mejía aprobó y promulgó la Ley Monetaria y Financiera 183-02, así como los reglamentos y normativas complementarias, que constituyen los pilares del sistema financiero dominicano. Fue debido a ese andamiaje legal que después de la crisis del 2003, la banca dominicana entró en un proceso de fortalecimiento de todos los indicadores financieros.
Agregó que la salud del sistema financiero, repetimos, que es fruto de la iniciativa del gobierno de Hipólito Mejía, se aprecia con el coeficiente de solvencia de capital, que en promedio ha superado el 15 por ciento en los últimos cinco años. A septiembre del año en curso, el índice de solvencia estaba situado en 17.60%, con un sobrante de capital de RD$56 mil 8 millones, lo que permitía absorber perdidas asociadas a distintos riesgos. La rentabilidad del patrimonio promedio de los bancos se ubicaba en 27.6%, y el nivel de eficiencia medido por el indicador de costos/ingresos se situaba en 66.3%.
El PRM exige que el gobierno de Danilo Medina preserve ese legado del gobierno de Hipólito Mejía, y que aplique estrictamente la Ley Monetaria y sus reglamentos, para evitar fraudes como el del Banco Peravia.
Opinó “El compromiso del Presidente Hipólito Mejía con la estabilidad monetaria y financiera de la nación se puede apreciar, en los requerimientos que hizo incluir en las leyes y las normas aprobadas en su mandato, para que la supervisión pudiera exigir niveles de capitalización que mantuvieran saludable el sistema financiero. En efecto, en el Artículo 37, literal c, de la mencionada Ley Monetaria y Financiera 183-02, se establece el capital pagado mínimo requerido por las diferentes entidades de intermediación financiera y en el Artículo 46, literal e, de la misma ley, se consigna que las entidades de intermediación financiera deben mantener un coeficiente de solvencia bancaria igual al 10 por ciento, que es la relación entre el patrimonio técnico y los activos y contingencias ponderados por riesgos”.
Está claro, continuó afirmando Martínez Moya, que a partir del marco legal aprobado durante el mandato del Presidente Mejía los accionistas son los únicos responsables de las pérdidas que se produzcan y quienes deben aportar el capital, según el riesgo que asuman, para enfrentar eventualidades como la que afecta al Banco Peravia. De esta manera se evita que sea el pueblo quien termine pagando los fraudes bancarios. Debido a la existencia de esta disposición fue que el gobierno del PLD y Leonel Fernández, no tuvo que usar los recursos del pueblo para cubrir el faltante del Banco del Progreso, sino que fueron los accionistas, con recursos propios, quienes aportaron los fondos.
Finalmente consideró que las autoridades deben traer al país a los principales ejecutivos del Banco Peravia para que devuelvan el dinero faltante y enfrenten a la justicia. Y el gobierno de Danilo Medina debe dar seguridad, lo antes posible, de que nadie, absolutamente nadie, sin importar el monto, perderá sus ahorros.