Por Vivian Collazo Montano*
Lima (PL) El calor y las largas horas de debates fueron los grandes protagonistas de 20 Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP20), que recién tuvo lugar en Lima, Perú.
Una temperatura poco usual para esta época del año en la capital del país andino, 25 grados y sol, hizo que algunos de los participantes, como la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, debieran usar abanicos para refrescarse.
El presidente Ollanta Humala expresó que el calor que agobia a los delegados, es una forma de "solidarizarnos con el planeta". "Bueno, así se siente el planeta, con calor", dijo el mandatario.
Lo cierto es que gracias a este hecho o a la sensatez de los participantes, tras largas horas de negociaciones y dos días después de lo previsto, los 195 países participantes, aprobaron el "Llamado de Lima para la Acción Climática", el cual deberá ser trabajado en los distintos grupos para ser firmado en la COP21 de París, el año próximo.
El presidente de la COP20, Manuel Pulgar-Vidal, señaló que "la decisión de Lima es sólida no solo porque cumplió los mandatos que le estableció la COP19 de Varsovia, sino porque a su vez aprobó el borrador que contiene los elementos para la negociación, cosa que nunca antes había ocurrido".
Indicó que el texto fortaleció la adaptación en las contribuciones nacionales -que son los programas que los países deben presentar el próximo año- y también los mecanismos de financiamiento.
"Estas contribuciones deberán proporcionar información de referencia sobre mitigación, incluyendo año base, periodos de tiempo e implementación, alcance y cobertura y procesos de planeación", expresa el informe.
En el aspecto pérdidas y daños, mecanismo creado en 2013 para situaciones en las que los impactos del cambio climático son tan grandes que exceden las capacidades de las poblaciones de enfrentarlos, y donde hubo bastantes reclamos de los países en desarrollo, se logró también un plan de trabajo inicial de dos años, como la composición de su Comité Ejecutivo.
A su vez, los anuncios de contribuciones al Fondo Verde para el Clima, sobrepasaron el objetivo inicial de 10 mil millones de dólares.
Christiana Figueres, Secretaria Ejecutiva de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), manifestó que los gobiernos llegaron a Lima con mucho optimismo tras los anuncios de acción climática hechos por la Unión Europea, China y Estados Unidos, y el aumento de las contribuciones al Fondo Verde para el Clima.
"Se van de Lima con una nueva oleada de positividad para París, con el acuerdo de una serie de decisiones clave y con agendas de acción que incluyen cómo lograr aumentar la financiación a la adaptación así como medidas forestales y en educación", aseveró.
"Las negociaciones han alcanzado un nuevo nivel de realismo y comprensión sobre lo que hay que hacer ahora, en los próximos 12 meses y en los años y décadas que vienen, si queremos de verdad y de forma decisiva afrontar el cambio climático", acotó Figueres.
Sin embargo, no todos quedaron satisfechos con los resultados obtenidos. Los representantes de India y Malasia consideraron que a pesar de la aprobación del documento, persiste la insatisfacción por pocos avances.
En tanto, el Fondo Mundial para la Naturaleza-Perú (WWF, por sus siglas en inglés), señaló que los gobiernos fallaron en alcanzar un acuerdo sobre planes específicos para reducir las emisiones antes del 2020.
Por su parte, Orlando Rey, asesor del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de Cuba, consideró que aún cuando no se logró todo lo esperado, se creó una buena premisa para entrar en la gran batalla del acuerdo 2015.
La decisión adoptada reitera el compromiso de finanzas de los países desarrollados para apoyar las acciones en los países en desarrollo y en general es una decisión balanceada, dijo Rey a Prensa Latina.
Nunca es todo lo que se quiere, es muy difícil poner de acuerdo a tantas delegaciones, siempre quedan insatisfacciones, pero estamos creando un marco de obligaciones que puede durar 20 o 30 años, acotó. /vm
* Periodista de Prensa Latina, enviada especial a la COP20