Revela que ha llorado luego de haber tomado una decisión
Santo Domingo- El juez de Atención Permanente del Distrito Nacional, José Alejandro Vargas, reveló que últimamente se han incrementado los casos de drogas y violencia de género en las audiencias de medidas de coerción.
Sin embargo, el magistrado Vargas aclaró que se ha producido una disminución de los hechos de raterías que se conocen en esas vistas.
En tal sentido, el también profesor universitario reconoció que hay precariedades en los recintos carcelarios para acoger la cantidad de reclusos que se envían diariamente.
Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema Canal 11, el jurista planteó que el Estado debe construir un gran centro de regeneración para enviar a jóvenes que comenten algunos ilícitos penales inducidos por la adicción a las drogas.
No obstante dijo que ese centro debe tener las condiciones de que el joven se vea obligado a cumplir con las medidas que se le aplique y que no pueda fugarse.
“Ciertamente en los últimos tiempos ha habido un incremento en los casos de drogas y en los hechos de violencia de género en las audiencias que celebramos, pero hemos notados una disminución en los casos de robos”, explicó el reconocido juez.
Reveló que en una ocasión el alcaide de la Penitenciaría Nacional de la Victoria le llamó para pedirle que no le enviara más reclusos debido a la falta de espacio que tenía en ese recinto carcelario.
Reconoció que ciertamente como dijo recientemente el obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santo Domingo Amancio Escapa hay congestionamiento de reclusos en las cárceles del país.
Atribuyó esa situación a la falta de recintos penitenciarios, y en tal sentido dijo que se necesita que el Estado construya más cárceles.
El juez Vargas Guerrero destacó el avance que ha experimentado el poder judicial en los últimos tiempos, pese a las precariedades económicas en que se desenvuelve.
En tal sentido planteó la necesidad de que cuando la rama del ejecutivo esté elaborando el presupuesto de la nación, le de participación a la justicia de plantear sus necesidades por ser un Poder del Estado, es decir una de las patas sobre las cuales descansa el Estado dominicano.
“Hay caso en que he tenido que tomar decisiones que he llorado”
El magistrado José Alejandro Vargas reveló que ha conocido caso en los que ha tenido que tomar decisiones que luego se ha retirado a su oficina a llorar.
El juez reaccionó en tal sentido, cuando fue cuestionado en torno a lo que sintió al momento de conocerle medida de coerción al joven acusado de lanzar un artefacto incendiario al Metro de Santo Domingo, aunque no precisó si se refería a ese hecho en particular.
“Quienes más tenemos que sufrir somos los jueces, y tenemos que sufrir callado”, reflexionó el juez de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional.
Explicó que antes de tomar una decisión, como cristiano, pone a Dios como guía, y luego de dictarla le dice a las partes por qué se vio en la obligación de tomar esa medida.
“Nos duele lo que sufre la víctima, nos duele también la situación que debe enfrentar el imputado, nos duele la miseria que padece un amplio sector de la población, el fin nos duele todo lo que le afecta a la sociedad”, agregó.
Aclaró que no es motivo de alegría para ningún juez mandar a una persona a prisión, pero aclaró que los magistrados lo único que hacen es interpretar las normas que el legislador ha creado con la obligación de aplicarlas.
En otro orden el magistrado Alejandro Vargas dijo que en el país debe llegar el momento en que ningún sector se dedique a acabar con un juez por una decisión judicial que haya tomado.
Sostuvo que como humano un juez se puede equivocar, pero por eso el legislador ha puesto a disposición de las partes los recursos para que puedan atacar la decisión emitida por ese magistrado o tribunal.