Con la disposición del presidente Danilo Medina de enviar otros 600 militares a la zona fronteriza, que sumados a los 22 mil existentes, la dominicanidad está reguardada y segura.
En los últimos días se observa mayor presencia militar en cada una de las siete provincias que conforman la frontera dominico-haitiana.
“Si algo se escapa, es porque se quiere dejar escapar”, manifestó el director de la Dirección de Desarrollo Fronterizo, Miguel Bejarán, quien aseguró que además de la seguridad militar, existen varios mecanismos de inteligencia e información utilizada por los militares en los puntos donde no hay presencia.
Destacó la labor que realiza el Cuerpo de Seguridad Fronteriza Cesfront, el cual indicó ha venido a reforzar el sentimiento de seguridad existente en la frontera, sin embargo, expresó que se debe seguir trabajando con los militares apostados allí, ya que la franja divisoria entre la República Dominicana y Haití es una gran tentación por el trasiego de armas y mercancías de todo tipo.
Llamó a los jefes de los cuerpos castrenses del país a escoger bien a los militares que envían a la frontera, y sugirió realizar supervisión permanente.
Durante su participación en el matutino Ojalá, por el Canal 4, explicó que el presidente Danilo Medina ha dado una contundente respuesta legal a la inmigración haitiana con la Ley de Naturalización.
Al referirse al Plan Nacional de Regularización, dijo que mientras no se sancione a los patronos que contratan mano de obra ilegal, para obligarlos a que su personal sea regulado, el Plan no servirá de nada.
Bejarán sostuvo que el peligro de la inmigración ilegal son los asentamientos que se realizan, y lamentó que el 90 por ciento de los empleados del sector agropecuario en las provincias fronterizas es haitiana.
Dijo que si a los dominicanos se les ofrecen salarios dignos e incentivos correspondientes, podrían realizar el trabajo que hoy hacen los haitianos.
“Ningún país del mundo se permite tanto peso migratorio como lo está haciendo la República Dominicana con los haitianos”, destacó el director de Desarrollo Fronterizo.
Consideró que la zona fronteriza es una gran oportunidad, y “hay todas las condiciones para que se desarrolle, por lo que abogó por mayor inversión en infraestructura y vías de comunicación vial, en fin en políticas públicas de desarrollo”