Dirigente opositor británico acusa a Cameron de complot en caso de la entidad bancaria.
Londres, 11 feb (PL) El líder de la oposición laborista, Edward Miliband, reprochó hoy al jefe de Gobierno británico, David Cameron, haber nombrado ministro a un expresidente del banco HSBC, envuelto en un escándalo por fraude fiscal.
Stephen Green, director general (2003-2006) y después presidente (2006-2010) de la entidad, considerada la mayor de Europa, fue nombrado por Cameron titular de Comercio en septiembre de 2010.
De acuerdo con la cadena pública de radio y televisión BBC, el caso de la filial suiza del HSBC alrededor del cual existen, además, acusaciones por lavado de dinero y organización criminal, toma así un tinte político, de cara a los comicios generales en Reino Unido, previstos para el 7 de mayo próximo.
Según el citado medio, Miliband aseguró conocer información a las alturas de septiembre de 2010 sobre la evasión fiscal a gran escala favorecida por el mencionado organismo bancario.
¿Quiere hacernos creer el Primer Ministro que de los tres años en los que Stephen Green es ministro, jamás habló con él de lo ocurrido en el HSBC?, preguntó el dirigente del Partido Laborista ante la Cámara de los Comunes.
¿Puede explicarnos el Primer Ministro las puertas giratorias que existen entre el Partido Conservador y la filial suiza del HSBC?, añadió el político, quien despliega una campaña para convertirse en jefe del Ejecutivo y desplazar así a la coalición en el poder, integrada por conservadores y liberaldemócratas.
Por su parte, Cameron recordó que los laboristas estaban en el gobierno en Londres en el momento de los hechos delictivos.
Ellos mismos colaboraron de forma asidua con Green cuando éste dirigía la entidad, apuntó el dirigente de los conservadores.
Sin embargo, Miliband también citó un artículo del diario The Guardian, que participa en la investigación periodística sobre este caso, en el cual se aseguraba la entrega en el pasado de cinco millones de libras esterlinas por parte de siete donantes del Partido Conservador, con cuentas en Suiza en el citado banco británico.
Aún así, comentarios difundidos en medios de comunicación resaltaron la omisión del líder laborista sobre la mención hecha en ese mismo artículo sobre medio millón de libras entregado a su propio partido por donantes con cuentas similares.
Con sede en Londres, pero activo a nivel planetario, el HSBC está acusado de gestionar más de 180 mil millones de euros de clientes ricos entre noviembre de 2006 y marzo de 2007 en cuentas en Suiza para ayudarles a evadir impuestos en sus países de origen.
HSBC fue en varios países como Francia y Bélgica, pero nunca en Reino Unido, según reportó la prensa internacional.
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