Evitar el ingreso de República Dominicana al Caricom, que se reúne este jueves en Las Bahamas, sería uno de los objetivos de la manifestación del miércoles en Puerto Príncipe.
Las manifestaciones ocurrieron en la víspera de una la reunión de las naciones que integran la Comunidad del Caribe (Caricom) que se celebra en Las Bahamas, en la que el tema principal es el de avanzar en la posible integración de República Dominicana a ese bloque económico.
En ese mismo tenor se inscribe la carta que enviara el canciller haitiano Pierre Duly Brutus a su par dominicano, Andrés Navarro, en la que le expone quejas sobre el trato a los inmigrantes de ese país en República Dominicana, rechazada de manera enérgica por el diplomático dominicano.
Ese proceso quedó interrumpido cuando el Tribunal Constitucional de República Dominicana emitió una sentencia que despoja de su nacionalidad a miles de dominicanos de origen haitiano.
Otro tema en discusión, de acuerdo a la agenda de la cumbre que habrá de concluir el viernes, es el establecimiento de un Comité de Embajadores de Caricom y sobre la financiación de la Secretaría de la organización.
Sectores de la sociedad civil haitiana y del gobierno mismo, al parecer entendieron, que un día antes de esa reunión, era necesario crear un ambiente adverso para evitar de nuevo el ingreso de República Dominicana al CARICOM.
No bastaba para impedirlo apelar a la Ley 168-13 y sus efectos entre los hijos de los inmigrantes haitianos, sino poner en el tapete situaciones como la del racismo y xenofobia, puntos sensibles en el ambiente diplomático internacional, y en especial en el bloque de naciones caribeño.
República Dominicana estrena una nueva política diplomática, que tiene en su centro exponer las acciones del Gobierno para proteger los derechos de los inmigrantes. Esta diplomacia destaca sobre manera los resultados positivos de la aplicación de la Ley de Regularización, que ha permitido que miles de hijos de extranjeros, la mayoría de haitianos, hayan normalizado su situación.
El Gobierno dominicano se ha quejado por la falta de apoyo de su par haitiano, al no entregar a tiempo documentos necesarios para normalizar la estadía de los nacionales de ese país que residen ilegalmente en territorio dominicano.
Los esfuerzos de República Dominicana son conocidos por el bloque de naciones del Caribe y han creado un ambiente que favorece un avance para su ingreso al mismo, situación que sectores haitianos han querido impedir con las manifestaciones del miércoles en Puerto Príncipe.
Ya el presidente del Caricom, el primer ministro bahameño Perry Christie había dicho en la víspera de la reunión para discutir el caso de República Dominicana que “la retirada de la nacionalidad a los dominicanos descendientes de haitianos decretada en septiembre de 2013 es una razón más por la que Caricom debe entablar un diálogo político con el territorio dominicano”.
Los países que conforman el organismo regional son Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Dominica, Granada, Guyana, Haití, Jamaica, Montserrat, Santa Lucía, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y Granadinas, Surinam y Trinidad y Tobago.
En ese foro, Haití tiene gran influencia, y ha logrado históricamente bloquear la participación de República Dominicana.