El presidente de la República, Danilo Medina, ha presentado su rendición de cuentas a la nación que dirige desde el Estado protegido por una voluminosa obra gubernamental esparcida a nivel nacional.
Se trata de una clara señal de la ejecutoria visualizada en un compendio de realizaciones orientadas a mejorar los niveles de vida de los dominicanos, especialmente los situados en la franja de la pobreza.
El discurso de Medina es optimista, constructivo, esperanzador, analítico, reflexivo y profundamente demostrativo de sus ejecutorias.
En una panorámica de una hora y 45 minutos nos ilustra fehacientemente sobre lo que se ha venido haciendo desde el Gobierno en materia de educación; salud, desarrollo humano, competitividad, sostenibilidad del sector eléctrico, agropecuaria, obras viales, seguridad ciudadana, el tema migratorio y nuestra política exterior.
La reacción inmediata de la mayoría de los dominicanos y dominicanas es que se trató de un excelente discurso sustentado con acciones concretas y cuyo epicentro ha sido la población más necesitada.
El rostro y las gesticulaciones del mandatario mientras dirigía su alocución al país refleja el esfuerzo, dedicación y entrega en estos primeros dos años y medio de su mandato presidencial, caracterizado por un intenso trabajo que no ha tenido descanso.
Contra la pobreza extrema
Medina fue enfático al plantear que desde el gobierno trabajará intensamente contra la pobreza extrema en el país, y anunció la aplicación de un nuevo Plan Integral Focalizado para el Combate a la Pobreza Extrema.
En ese contexto, reflexionó exponiendo que su gestión no tolerará que tantos dominicanos vivan en la pobreza extrema “al igual que no pudimos tolerar que hubiera gente que se quedara fuera de la alfabetización”.
Reconoció los esfuerzos encaminados desde la Vicepresidencia de la República que ya incorporó 110,273 nuevas familias al programa Solidaridad, superando la meta establecida para el año 2014, y dio apoyo a 710 mil hogares mediante el Programa Progresando con Solidaridad.
“Esta iniciativa y el resto de programas sociales, tienen un papel fundamental en la consecución de uno de los objetivos más importantes de nuestra nación: La erradicación de la pobreza extrema”, dijo el presidente Medina.
Al respecto, adelantó que el Gobierno coordinará y ampliará los programas de apoyo social, para que tengan un mayor impacto en aquellas zonas donde más se necesita, tanto en la ciudad como en el campo.
“Esta red de iniciativas cubrirá todos los aspectos que más inciden en la condición de vulnerabilidad de las personas: desde el acceso a los servicios básicos, hasta la vivienda y, por supuesto, el empleo”, expuso el jefe de Estado en su mensaje desde la Asamblea Nacional.
Entre otros logros citó los avances alcanzados en el Plan Nacional de Alfabetización; la construcción de diez mil aulas y el inicio de otras diez mil este año para el programa de tandas extendidas, disminución de la criminalidad tras la aplicación del sistema de seguridad 911, el otorgamiento en el 2014 de RD$ 2,333 millones a la formación de los maestros estatales, crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) el año pasado en 7.3% y el programa de transparencia en el manejo presupuestal de las instituciones públicas.
También, la reconstrucción y equipamiento del hospital Darío Contreras, el proyecto habitacional de La Barquita, los trabajos de construcción de la Ciudad Juan Bosch y del hospital Luis Eduardo Lora, las iniciativas de desarrollo en Bahías de las Águilas, Pedernales, con el auspicio del gobierno e inversionistas privados y la firme decisión gubernamental de no extender la prórroga al proceso de regularización de extranjeros que viven en el país.
Evidentemente, que la intervención del mandatario en el Congreso Nacional tiene una dimensión histórica no tan solo por la trascendencia de los temas abordados sino igualmente ante la conmemoración del Día de la Independencia Nacional.
La generalidad de la población dominicana ha reconocido la capacidad de trabajo y esmero del presidente Danilo Medina por enrumbarnos por los senderos del desarrollo y el progreso.
Su estilo mesurado, sencillo y austero le ha permitido captar un nivel de simpatía oscilante entre el 85 y 90 por ciento de la ciudadanía.
Y está claro, hoy más que nunca que tiene bien trillado el camino a su favor en caso de que decida optar por la reelección presidencial.
Es solo cuestión de esperar, ya veremos.
Sábado, 28 de Febrero del 2015