Por Nélsido Herasme
El silencio descuadra, rompe todos los esquemas, lleva de manera inevitable a la duda, a la incertidumbre e incomunica.
El silencio hace daño, mucho daño, capaz de doler, a su manera, más que una profunda herida, porque no hay sutura que ayude a cicatrizarlo.
A veces el silencio suele ser un arma de doble filo, con su rompimiento se pueden aclarar cosas, pero mantenerlo puede perjudicar.
Desde niño siempre hemos escuchado la frase “el que calla otorga”. Por ello a veces me quiero reír pero la vergüenza de ser dominicano no me deja, cuando escucho y leo a personas, en un esfuerzo titánico, tratando de defender a Leonel Fernández, cuando este es mencionado por un ex condenado por drogas, quien públicamente le hace “el cobro de un dinero, que según dice, le prestó”.
Creo que este es el momento perfecto y el escenario ideal para que el doctor Fernández hable y desmienta al ex confeso, o de lo contrario le pida perdón a Dios y a la población, porque los políticos también son dignos de la misericordia.
Esta situación ha soltado los demonios en el país, por lo que ya, Humberto Salazar, un funcionario y aliado incondicional fue apeado del tren gubernamental y otro aliado, Vinicio Castillo Semán, aunque es diputado, está provocando una situación engorrosa en las relaciones entre gobierno y el partido que lo sostiene.
Ahora se hace mucho más que necesaria que en el proyecto aprobado en primera lectura por los diputados sea colocada la enmienda de que los aportes que se le den a los partidos y candidatos durante las campañas electorales sean transparentados.
De seguir dándole uso, sin democracia, a su mayoría aplastante, en procura de arrodillar ante sus pies a todo el mundo, llegará el momento de saber donde es que el maco se engancha el machete.
Por alta que sea la matrícula del PLD en ambas cámaras y por más tribunales que tenga a su servicio, la mayoría es el pueblo y es quien decide en cada certamen electoral.
Es por ellos que instituciones der la sociedad civil, como Participación ciudadana, Fundación Justicia y Transparencia, Asociación Dominicana Contra la Corrupción, la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE), el Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), iglesias y universidades, alertan ante el uso de recursos públicos y fuentes ilícitas de dinero como el lavado de activos y narcotráfico, y que defienden la igualdad de oportunidades en los procesos de campaña en provecho de todas las organizaciones y candidaturas.