Panamá, 11 abr (PL) El primer paso en los diálogos para restablecer las relaciones entre Estados Unidos y Cuba se refiere a un cambio de política norteamericana que implica reconocer al gobierno revolucionario, afirmó hoy el canciller Bruno Rodríguez.
En conferencia de prensa el representante de la isla caribeña sostuvo que esta primera etapa es lo que el presidente Barack Obama ha llamado un cambio de política que implica el reconocimiento del gobierno cubano, mediante el restablecimiento de relaciones diplomáticas y la apertura de embajadas.
De acuerdo con Rodríguez, en este periodo centrado en temas diplomáticos "se trabaja de mutuo acuerdo y se alcanzan progresos para crear el contexto apropiado", en referencia al proceso para restablecer nexos anunciado en diciembre pasado.
Para Cuba es importante que esta etapa concluya con la decisión justa de que la isla sea retirada de la lista de países patrocinadores del terrorismo, agregó, así como la restauración de los servicios bancarios a la Sección de Intereses de Cuba en Washington.
La ausencia de esos servicios, continuó, es consecuencia de la aplicación del bloqueo económico en el sector financiero.
"Se trabaja en aspectos del normal funcionamiento de ambas embajadas", precisó, y mencionó que otras cuestiones requieren posteriores negociaciones.
Aseguró que "está la voluntad de seguir trabajando y encontrando puntos comunes", basados en el absoluto cumplimiento de las normativas internacionales referidas al respeto por parte de las representaciones diplomáticas de las leyes de los países receptores.
Una vez que finalice la parte diplomática, argumentó, y haya un contexto propicio y un panorama regional apropiado, podrá trabajarse en fijar nuevas fechas para continuar trabajando de cara a la normalización de las relaciones.
Señaló que ese será un proceso largo y complejo que incluye cuestiones como el levantamiento del bloqueo económico de Washington contra Cuba, y la devolución del territorio ocupado por la base naval norteamericana en Guantánamo.
Rodríguez emitió las declaraciones poco después de que se celebrara un encuentro entre los presidentes Raúl Castro y Barack Obama, en que ambos reiteraron la voluntad de diálogo.