Los residuos sólidos constituyen un problema globalizado que afecta la salud, daña el medio ambiente e incide en el cambio climático, afectando las actividades de prevención ante el riesgo de desastres naturales, por lo que es necesario adoptar políticas destinadas a educar a la población y buscar soluciones adecuadas.
Así lo estableció, Inocencio Garcia Javier, viceministro de cooperación internacional del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo del país, al participar en el Primer Seminario Internacional para la Gestión Integral de los Residuos Sólidos Municipales.
Aseguró, sin embargo, que la estructura administrativa del sector público en asuntos municipales, carece de una “directriz efectiva” para asesorar a los municipios en materia de residuos y de tomar acciones prácticas en materia de ejecución, planificación y manejo de la llamada “basura”.
Garcia Javier, entiende que para mejorar la capacidad de los municipios en materia de manejo de desechos sólidos, es necesario impulsar acciones, proyectos y programas que contribuyan a la solución del problema mediante la “implementación de programas educativos”.
El funcionario habló en la apertura del Primer Seminario Internacional para la Gestión Integral de los Residuos Sólidos, organizado por el Comité Coordinador Nacional, Ministerio de Medio Ambiente, Salud Publica, Educación, la Liga Municipal Dominicana, Federación Dominicana de Municipio y la Red Nacional de Apoyo Empresarial a la Protección Ambiental.
“La basura (desechos sólidos) ya es considerada insumo y materia para obtener productos terminados que generan recursos, empleos que con un manejo apropiado incidirán favorablemente en la salud y medio ambiente de las comunidades”, puntualizó.
Buscar solución a los problemas de desechos sólidos es fundamental, debido a que en el país existen 350 vertederos a cielo abierto, los cuales generan aproximadamente 10,200 toneladas de “basura”.
A su juicio, para una gestión efectiva es necesario cambiar comportamientos, y que todas las estrategias y políticas estén articuladas hacia el objetivo de resolver la situación de los residuos, desde la educación, la cohesión territorial, fortalecimiento de los procesos de descentralización de competencias, generación y asignación de recursos e involucramiento de la ciudadanía.