Por Claudio A. Caamaño Vélez/@ClaudioCaamano
¿Nos hemos puesto a pensar seriamente donde radica la popularidad de Danilo? ¿Estará basada en realidades, o más bien será una ilusión planificada de manera minuciosa?
No pretendo que satanicemos a Danilo, sólo les pido que seamos objetivos y reflexionemos sobre la gestión de nuestro actual presidente. Que valoremos más allá de los pequeños detalles; más allá de caminar por un tronco, saltar un charco o tomarse un coco en la carretera.
¿Qué ha hecho Danilo para ganar la valoración que tiene? Pensemos un momento en lo que es la función de un gobernante. Pensemos en la seguridad ciudadana, el desempleo, la inflación, el control de la administración pública, la protección de los recursos naturales, el endeudamiento externo, etc.
Comencemos por el principal “logro” del gobierno de Danilo: la educación. Pensarán muchos que ese es un logro que nadie le puede discutir. Se equivocan, ese es un logro del pueblo dominicano, que se tiró a las calles a exigir el cumplimiento del 4%. Yo participé en muchas marchas y en ninguna vi a Danilo; tal vez no llegamos a coincidir; que mala suerte la mía.
Danilo firmó el acuerdo, como también lo hicieron todos los candidatos presidenciales del 2012, porque era imprescindible para llegar al poder; lo hizo por conveniencia no por compromiso. Lo cumplió porque si no lo hacía el pueblo se le rebelaría en las calles, no porque fuera un “hombre de palabra”.
Condenamos a Leonel por ser un corrupto, pero ¿qué ha hecho Danilo contra la corrupción? ¿Qué ha hecho con los miles de funcionarios corruptos de la administración de Leonel, con esos que hicieron fortunas millonarias con el dinero del pueblo? Muchos de ellos siguen siendo funcionarios y siguen robando, y los que no lo son disfrutan plácidamente sus fortunas envueltos en mantos de impunidad que él fomenta.
¡¿Que la impunidad es culpa de Leonel?!… Danilo es el presidente del Consejo Nacional de la Magistratura, organismo supremo del control judicial, con capacidad para sancionar, destituir o remover jueces, incluso los de las Altas Cortes. En lo personal no he sabido que Danilo haya hecho algo contra esa “mafia judicial” que instauró Leonel.
En la administración de Danilo se ha incrementado exponencialmente la inseguridad ciudadana, los casos de crímenes son más frecuentes. No lo digo yo, lo dicen las estadísticas serías, lo dicen las encuestas realizadas a la población sobre este tema. La policía sigue ganando sueldos de miseria y comportándose como una verdadera organización delictiva. El Ministerio Público continúa siendo un cuerpo incapaz de hacer su rol. ¿Quién es el jefe supremo de la Policía y del Ministerio Público?… Adivinen ¿Leonel? No: ¡Danilo!
En la administración de Danilo, la población ha visto como el ITBIS ha subido del 16% a 18% y como productos de primera necesidad (leche, huevo, aceite, etc.) que antes no pagaban, ahora se les carga de un 10% a un 14% de ITBIS. Cabe resaltar, que este impuesto es el más perjudicial de todos, pues ataca a la base del consumo, y por ende, al que menos tiene. Así actúa el amigo de los pobres, el presidente de los más necesitados. Por un lado da tarjetitas a algunos y por el otro les quita a todos.
Danilo se ha vendido como un presidente austero, pero ¿dónde está esa austeridad?: en qué su esposa no usa costosos sombreros, en qué no sale a pasear tanto al extranjero, en qué anda con menos escoltas. Pero ¿qué pasa con el verdadero gasto del gobierno?: los sueldos de los funcionarios, las botellas, la calidad del gasto público. Decir que muchos de sus funcionarios, que ya ganaban salarios exorbitantes, se los han subido. No solo dejó las botellas de Leonel, sino que también metió las suyas. Solo hay que visitar cualquier ministerio público para ver la sobre población de personal; casi no caben.
La supuesta prosperidad de este gobierno está soportada en la hipoteca de nuestro país. El endeudamiento externo ha llegado a niveles sin precedentes, y cada año aumenta y acelera.
En cuanto a la protección del medio ambiente, vemos como esos diputados, los cuales han mostrado ser mayoritariamente “danilistas”, fueron los mismos que aprobaron sin leer el contrato con la Barrick Gold. Danilo tuvo en su escritorio la ley que convertía a Loma Miranda en Parque Nacional, sólo un poco de tinta de su bolígrafo y ya. Pero tomó la decisión de ser un servil de los que depredan nuestro país, y de una manera insólita e ilegal, alteró por completo el objeto y la naturaleza de esa ley.
Danilo desde que asumió la presidencia el 16 de agosto de 2012, incluso antes, ha estado trabajando arduamente en proyectar su imagen y construirse una alta popularidad. Desde un principio ha trabajado en su proyecto reeleccionista. Hoy vemos los magníficos resultados de la construcción estratégica de esa ilusión. Pero no me hagan caso a mí, bajemos a la realidad, miremos más allá de esa nube creada por la Dirección de Comunicación y Prensa de la Presidencia, hagamos nuestros propios juicios. Que sean nuestros juicios, no los que nos quieren meter en la cabeza a fuerza de propaganda y distorsión de la verdad.