Demanda discusiones incluyentes sobre el salario real, en el contexto de una reforma a la ley laboral que busque soluciones serias –beneficiosas para los trabajadores y las empresas- del tema de la censantía.
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Asociación de Empresas Industriales de Herrera y Provincia Santo Domingo (AEIH) externó su decepción frente a la forma en que se incrementaron los salarios de los empleados la semana pasada, pecando otra vez de una falta de visión integral.
Manifestó que al margen de que el aumento nominal aplicado no llena las expectativas, otra vez “prevalecieron las mezquindades” que, desde su punto de vista, han caracterizado las discusiones en materia salarial en los últimos años.
El presidente de la organización empresarial, Antonio Taveras Guzmán, señaló que el gran debate pendiente es en torno al salario real, basado en la productividad del trabajo, el poder de compra y la eficiencia de las empresas, lo cual implica una reforma profunda a la legislación laboral.
En ese contexto, el dirigente empresarial lamentó que las discusiones sobre el Código Laboral hayan sido no sólo excluyentes, sino que “se desarrollen de manera filistea”, con unos niveles de simplismo que impiden soluciones de largo plazo para empleados y empleadores.
Taveras Guzmán consideró que la última salida acordada entre gobierno y empleadores para mitigar en parte el rezago de los salarios de los trabajadores, debe ser vista como un simple compás de espera “para que las cosas no vuelvan a hacerse de la misma manera”.
“Insistimos en que el trabajador dominicano es el que menos recibe y el que más cuesta; se trata de una contradicción que debe ser revertida a partir de un gran consenso entre empleados, empleadores y gobierno en el contexto de una reforma al Código Laboral”, sostuvo el presidente de la AEIH.
Abogó, sin embargo, porque las discusiones sobre la legislación laboral no se queden en lo superficial y, por el contrario, aborden con seriedad uno de los tópicos fundamentales de la reforma, que es la cesantía de los trabajadores.
A su juicio, no es posible que el pasivo laboral se acumula en forma creciente, mientras las empresas no pueden deducirlo del Impuesto sobre la Renta, como tampoco es admisible que esos fondos no estén generando rendimiento en instituciones financieras en forma de ahorros pertenecientes a los trabajadores.
Indicó que hace falta grandes acuerdos sobre el sistema de seguridad social, la administración de riesgo de salud y los fondos de pensiones a fin de lograr mayor bienestar para los trabajadores, menores costos a las empresas y la elevación de la calidad del trabajo. “Eso llevaría a la mejoría del salario real”, concluyó Taveras Guzmán.