Tras considerar de inaceptable en los términos en que esta elaborado el proyecto de reforma constitucional presentado en el Senado de la República, el ex presidente Leonel Fernández formuló una serie de sugerencias que evitarían que iniciativas como la actual se repitan en el futuro.
En su discurso de este lunes, Fernández cuestionó la pretendida reforma con la que se buscaría facilitar la reelección del presidente Danilo Medina, cuyo nombre no mencionó durante la alocución. Tampoco hizo referencia a la reunión del comité político que decidió impulsar la referida reforma, cuya sesión presidió el pasado 19 de abril.
Su alocución, como ya se había vaticinado en este diario, se centró en formular razones jurídicas por la cual a su entender la Constitución no debe ser modificada, pero en el momento en que dejó entrever esa posibilidad dijo que entonces habría que cambiar otros artículos de la Carta Magna para que no fuera flexible como lo es ahora, sino rígida.
El presidente del PLD, dijo que la reforma debe contemplar modificaciones que eviten que el presidente de turno intente de nuevo reelegirse para los comicios del 2020 en caso de que esta lograra la reelección en las elecciones del 16 de mayo del 2016.
También sugirio que se estblezca el caracter orgánico de la ley de reforma constitucional para que no se repita que un gobernante pretenda hacerlo para beneficiarse asimimo.
El gobernante habló a través de una cadena de radio y televisión para fijar su posición sobre la crisis que vive el PLD por las pretensiones de reforma constitucional.
"En nuestro humilde criterio, el proyecto de reforma que se ha depositado en el Senado de la República, no ofrece, por sí solo, suficientes garantías ni seguridad jurídica en el sentido de que la reforma que se quiere hacer en la actualidad, no volverá a repetirse en el futuro" dijo.
Expresó que no se debe poner en dudas la palabra o las sanas intenciones de los Senadores que han formulado la propuesta de reforma constitucional y observó que "es que, sencillamente, el artículo transitorio que se aspira a consignar dejaría tan vulnerable la posibilidad de reformar nuestra Constitución en el futuro, como en la actualidad interpretan algunos miembros de nuestra comunidad jurídica que puede hacerse, esto es, sin aprobación de ley orgánica ni realización de referendo aprobatorio".
"Eso, naturalmente, sería sumamente peligroso para el porvenir de nuestro pueblo. Sería nefasto. Sería catastrófico, ya que dejaría las posibilidades abiertas para que en la posteridad surja algún aventurero que modifique de nuevo la Constitución, pero esta vez para establecer la reelección indefinida, e intentar perpetuarse en el poder" agregó.
Así tendríamos el Trujillo del siglo XXI, que vendría a cercenar nuestras libertades, a mutilar nuestra dignidad y a truncar nuestro porvenir como pueblo.
Fernández dijo que una reforma como la planteada no se puede permitir, porque la historia "condenaría a nuestra generación como irresponsable, irreflexiva e insensata, pues advirtiendo el peligro y la amenaza que significaba para el futuro de nuestra democracia, de nuestra sociedad y de nuestras familias, no tuvimos el valor de alzar nuestra voz y actuar en consecuencia".
Al considerar de insuficiente el proyecto de ley que cursa actualmente en el Senado, dio que es por lo tanto, inaceptable, por el riesgo y la inseguridad que implica para la supervivencia de nuestras instituciones democráticas.
Fue cuando entonces planteó que dicho proyecto debería contemplarse modificar el artículo 270 del texto constitucional, para que en lo sucesivo, en forma directa señale que la Ley de Convocatoria a la Asamblea Nacional Revisora debe ser aprobada, ni siquiera como una ley orgánica, sino como una ley especial, con las tres cuartas partes de la matrícula de ambas cámaras.
"De igual manera, agregó- debería someterse a modificación el artículo 271, para establecer que en lo sucesivo, si la reforma constitucional versa sobre el mandato de elección constitucional del Presidente de la República, la decisión deberá adoptarse también por la mayoría de las tres cuartas partes de los miembros de la Asamblea Revisora
Otra modificación al proyecto sugerida es que se someta al Congreso Nacional, para que rija en lo adelante, la ley que dispone la Consulta Popular, para que pueda modificarse la Constitución conforme al artículo 210 de la misma.
"Finalmente, en lo atinente a la celebración del referendo aprobatorio, previsto en el artículo 272, la propuesta es que el número de electores se eleve del 30 al 60 por ciento de los inscritos en el registro electoral, para de esa manera hacerlo más participativo y democrático", manifestó.
"La idea es, vuelvo a repetirlo, que la Constitución sea rígida. Que no pueda ser cambiada o modificada tan fácilmente. Que no dé lugar a interpretaciones aviesas o acomodaticias. Que la Constitución sea, de manera permanente, el pacto suscrito por los diversos sectores que componen la sociedad dominicana, para que prevalezca siempre la paz, el progreso y la convivencia civilizada" manifestó.